Se planteó como un espacio para habilitar el Parque Botánico «Lo Marabú» pero en la actualidad no es más que una finca agrícola bordeada de una vallado de pino silvestre que ha costado 352.987,33 euros. El Ayuntamiento de Rojales permite a un vecino de la localidad explotar libremente como tierra de cultivo un área enmarcada en el Parque Natural de las Lagunas de la Mata y Torrevieja, de dominio público. Aunque el alcalde, el socialista Antonio Pérez, explicó hace unos meses que se trataba de una pequeña explotación para el autoconsumo, lo cierto es que la superficie labrada se ha ido ampliando poco a poco y ocupa hoy cientos de metros cuadrados de un área que se ha convertido en un gran bancal restringido al resto de residentes.

La valla de 2,5 kilómetros que protege este espacio fue sufragada con fondos del Plan Confianza de la Generalitat Valenciana en el marco de un proyecto puesto en marcha por el antecesor de Pérez en el cargo, Antonio Martínez (PP), durante la pasada legislatura. El actual primer edil socialista, que participó en la inauguración de este vallado de pino silvestre «único en la Comunitat» el pasado 14 de enero, dijo entonces que la idea es convertir este espacio natural en una instalación repleta de arbolado y plantas autóctonas que contaría con un aula de la naturaleza y centro de interpretación de la flora y la fauna. Advirtió que se trataba de un proyecto a largo plazo, pues requería de una fuerte inversión que, en tiempos de crisis, es difícil.

Acabada la inauguración, la puerta de esta valla se cerró y, al parecer, se cedió una copia a quien era el propietario de la parcela antes de que se recalificara la zona y pasara a ser de dominio público para que la siguiera disfrutando, aunque en realidad no es tal porque no todos los vecinos pueden acceder.

Desde el Partido Demócrata de Rojales, su concejal Desiderio Aráez se pregunta hasta cuándo seguirá este trato de favor desde el Ayuntamiento para con quien se ha convertido en el dueño de un bancal con una valla de oro.