Desde mañana y hasta el 2 de marzo la Sala-Museo San Juan de Dios, en Orihuela, acoge las esculturas de José Manuel Rodríguez Trigueros (Orihuela, 1983), quien expone en su tierra «De vuelta al estudio».

­­

­La mayor parte de su trabajo en la muestra aborda el pie humano y principalmente tratado sobre un material tan duro como la piedra.

¿Por qué trabaja el pie?.

En 2008 empecé a trabajar la piedra. En 2011 tuve un contratiempo de salud y este es el resultado de la temática que dejé entonces y que voy a retomar. ¿Por qué el pie? pues como una forma distinta de ver al ser humano. Una parte de la anatomía que siempre se ha visto mal porque la mano siempre se ve para reflejar las emociones, pero no el pie.

Ha hecho pintura, talla y escultura en piedra...

Me especialicé en escultura porque es un material muy agradecido y del que no había expuesto. Durante dos años desarrollé esta temática (del pie) y la hice en 3D. Es casi todo lo que presento aquí en piedra viva. Es bastante duro, yo trabajo la pieza directa, desde el principio. Trabajo sin máquinas pero es muy agradecido.

Habla de un trabajo duro, ¿qué puede tardar en una escultura?

Puedo tardar dos meses a piezas de pequeño formato a incluso años. Uno tiene que madurar y tener vivencias para ver qué le falta a una escultura.

¿Qué tipo de estilo lo define mejor?

Soy superfigurativo de siempre. Y estoy llevando el pie a la síntesis máxima... Si tapas partes del pie, como los dedos, la parte que te queda en la obra puede ser abstracta, figuración, vais a ver cosas deformadas y que no se ajusta a la realidad, es casi abstracción.