El Ayuntamiento de Catral ha aprobado una ordenanza para regular la expedición de licencias urbanísticas y afines que sienta las bases para que cientos de propietarios de viviendas de la huerta construidas fuera de ordenación durante la última década puedan obtener las ansiadas licencias de ocupación.
La normativa, aprobada en pleno el pasado mes de noviembre con los votos del equipo de gobierno del PSOE, Socialistas de Catral y Alternativa por Catral, y con la abstención de la oposición del PP, ha entrado en vigor de forma definitiva tras superar el periodo de exposición de 30 días sin que se haya presentado ninguna alegación al texto original.
Así, en su artículo 17 se enumera la documentación que tendrán que presentar los dueños de casas fuera de ordenación para acceder a la licencia de ocupación, entre la que figura el plano de distribución de la vivienda, los cuatro últimos recibos del IBI y el justificante de haber pagado las tasas correspondientes en el Ayuntamiento.
Aunque oficialmente los propietarios no se pueden beneficiar todavía de esta medida, la ordenanza abre la puerta para que este proceso pueda iniciarse en un futuro próximo.
La edil de Urbanismo, María Asunción Salinas, explicó ayer que las bases para poder expedir estas licencias se han calcado de ordenanzas similares que están en vigor en municipios como Elche o Alicante. Explica que un requisito indispensable para los futuros beneficiarios será cotejar que la vivienda en cuestión está totalmente terminada y que los expedientes de infracción urbanística han prescrito, entre otras cuestiones, como demostrar que se han instalado los correspondientes sistemas de depuración de aguas residuales. Tras esto, los técnicos municipales analizarán cada caso de forma individual, y si se cumplen los requisitos, el Ayuntamiento expedirá la licencia de ocupación, que permitirá cuestiones tan básicas como poder solicitar el alta en el servicio de electricidad o de agua potable, ceder la propiedad o realizar pequeñas obras de mantenimiento.
Expedientes
En el término municipal catralense existen cerca de 1.200 casas construidas fuera de ordenación. Sobre algunas de ellas ya no pesan expedientes de infracción porque han prescrito, pero sobre otras dichos procesos sancionadores, que podrían obligar a la demolición de las viviendas, están en vigor.
Cabe recordar que en 2006 la Generalitat retiró al municipio las competencias en materia de urbanismo por la eclosión de casas irregulares en la huerta. Ahora, el Ayuntamiento pedirá a la Conselleria del área que detalle cuántas son las propiedades afectadas por estos expedientes sancionadores, para discernir cuáles se pueden acoger al nuevo plan. Vistos los antecedentes, sorprende que esta sea la primera ordenanza urbanística con la que vaya a contar el municipio desde la democracia.
El alcalde, Pedro Zaplana, mantiene que los anteriores intentos del PP de regularizar las viviendas a través de un nuevo Plan General o de un Plan de minimización no son viables y cree que con esta propuesta se podrían regular al menos la mitad de las propiedades, probablemente antes de que acabe la legislatura.
