El interventor de Crevillent, Fernando Urruticoechea, se postula como nuevo interventor del Ayuntamiento de Orihuela, lo que no se resolverá antes de la primavera cuando se conozca cómo ha quedado el concurso público estatal. Lo que tendría que ser una noticia menor, como es el caso de que un ayuntamiento cubra una plaza de alto funcionario, no lo es para este caso por varias cuestiones. Una es que la plaza ha sido durante años una de las «sillas calientes» en Orihuela pues José Manuel Espinosa Fenoll, quien ocupó el cargo durante el mandato de José Manuel Medina, estuvo imputado por irregularidades de las cuales se autoinculpó como, por ejemplo, de haber endosado pagarés municipales por obras que no se había realizado.
Tras su salida, el Ayuntamiento de Orihuela encargó esta tarea a Javier Cifuentes, quien durante años se ha hecho cargo de la misma, aunque carece de una habilitación; es decir, la plaza tiene que ser cubierta por un funcionario con esta cualificación aunque el hecho de que durante años no se haya cubierto, porque nadie la ha pedido, ha permitido a éste realizar el trabajo. Otra cuestión curiosa es que el aspirante, Fernando Urruticoechea, se hizo famoso en la televisión después de participar en el programa «Salvados» de La Sexta y Jordi Évole, donde denunció la corrupción en un ayuntamiento en el que había trabajado, en Castro Urdiales, en aquellas declaraciones aseguraba que «la corrupción en el Ayuntamiento de Castro Urdiales está ligada a la construcción. Unos pocos se puedan llevan casi todo hace falta que hayan migajas de basuras, jardinería? donde todo el mundo pilla». Gracias a sus informes y a la actuación del juez Luis Acayro Sánchez -afirma la propia página web de La Sexta- por los juzgados cántabros pasaron mucha gente y «hubo 15 condenados y 158 imputados en las diversas causas», explicaba el interventor. El Tribunal de Cuentas le dio la razón. «Parte del dinero que ha salido de arcas municipales ha servido para financiar a partidos políticos», afirmaba.
Polémica
Urruticoechea acabó como interventor en el Ayuntamiento de Crevillent donde ha tenido una tensa polémica con el alcalde, César Augusto Asencio, que ha quedado reflejada en las páginas de INFORMACIÓN porque ha paralizado la gestión económica, algo que el alcalde llegó a justificar por su «dejadez». El periódico intentó ayer hablar con el aspirante, pero se encuentra de baja en el Ayuntamiento crevillentino desde hace dos meses y nadie sabe cuándo volverá. Al parecer, además de aspirar a la plaza de Orihuela también lo hace a la de Ceuta, aunque Orihuela es su primera opción.
