Telas, plástico, aluminio o zapatos son algunas de las exportaciones a Túnez, que ha experimentado un crecimiento del 19% y es el quinto cliente de Alicante. Así, los efectos adversos para el comercio de la «Primavera Árabe» parecen haberse frenado en el primer país donde se iniciaron las revueltas sociales. Igualmente, el comercio con Libia se ha recuperado en 2013, tras la grave crisis política que viene arrastrando este país hace unos años. A Libia se vendieron productos provinciales por valor de 7,2 millones (+86%). Y, entre ellos, destacan el calzado y la piedra natural, según las mismas estadísticas de las Cámaras. Por contra, el recrudecimiento de la crisis en Egipto ha provocado una evolución inversa. Las exportaciones alicantinas han descendido y los 4,5 millones vendidos suponen un 24% menos que hace un año. En Libia, Togo, Costa de Marfil o Guinea es el mármol, tanto en bruto como manufacturado, el que lidera las ventas de los sectores alicantinos, según las mismas estadísticas camerales. Son pequeños clientes sobre los que los empresarios no se atreven a determinar si son «un nuevo nicho de mercado» o si el comercio que mantienen con ellos es meramente «coyuntural». En cualquier caso, como reiteran, «todo ayuda en la situación económica actual». R. C.