Agentes de Policía Local han imputado a un vecino español la presunta comisión de un delito de falsedad documental, por usar de forma fraudulenta una tarjeta de estacionamiento para personas con movilidad reducida y aparcar su vehículo en plazas reservadas. Los agentes durante su tarea diaria de control de tráfico estaban comprobando si los vehículos estacionados en las reservas para personas con movilidad reducida disponían de la obligatoria tarjeta. Después de consultar a los ayuntamientos de Madrid y Leganés confirmaron que el original de un conductor pertenecía a una persona que nada tenía que ver con los ocupantes.

El vehículo fue denunciado y trasladado al depósito municipal. El imputado fue citado a comparecer en los juzgado para la celebración de juicio rápido en el que puede ser condenado a penas de prisión de seis meses a tres años y una multa de seis a doce meses.