La pregunta partió de Pedro Mancebo, de CLr-Claro: «¿Alcalde, el Registro Civil autoriza las bodas en el "Santo Sepulcro"?. Guillén puso cara de póker y contestó con un: «No lo sé y ahora no se lo podría decir», dijo zanjando un tema que tiene miga por varios motivos. Uno es que Guillén ha casado a oriolanos en el Santo Sepulcro o, al menos, a uno que se sepa. A Manuel Gallud el 4 de agosto de 2012 cuando este aún no tenía cargo y era un vecino más, aunque un entrañable compañero de partido.

Otro, que no es sólo que allí se casara Gallud en una ceremonia que ofició el regidor, sino que algo de dinero costó a las arcas públicas porque la Concejalía de Protocolo autorizó para ese día megafonía y un atril. Curiosamente por aquel entonces era el grupo municipal de CLr-Claro el responsable de este área y meses más tarde propuso que allí se cobrara por boda hasta 225 euros para cubrir los gastos derivados de abrir una instalación municipal, algo que a día de hoy no está resuelto. Y tres, si la boda de Gallud se celebró allí y el Registro Civil no lo ha autorizado no vale porque el acta que se levantó dice que el acto que genera derechos y obligaciones entre los cónyuges se celebró en el Santo Sepulcro y no en el Ayuntamiento como era posible.

Preguntado ayer por esta cuestión y recordando aquel día, Manuel Gallud aseguraba que no era tan importante el dónde se casa uno: «Yo, siendo concejal la anterior legislatura, he casado a personas en Montepinar pero el acta se ha levantado en el Ayuntamiento», que sí está autorizado por el Registro Civil. Pues que se lo mire porque igual sigue soltero.

ANECDOTARIO

"Mociones socialistas y a mucha honra"

Puertas y ventanas abiertas, mucho abanico y un aire acondicionado que no se notaba. «Es para que no nos resfriemos», bromeaba ayer el concejal Damaso Aparicio (PP), otros pensaban que era para que aquello no se eternizara. En un momento del pleno y tras oír a Moreno decir eso de: «Son seis mociones socialistas», se oyó entre el público un comentario: «Y a mucha honra». A la mujer le gustó el participar de la sesión e instantes después volvió a realizar otro comentario que Guillén, viendo que la cosa se le iba de las manos, cortó en seco.

Insultos y odios

Antonia Moreno dijo ayer que el PP le tiene «odio personal» y tildó a Mónica Lorente de «maleducada teniendo en su casa tan buenos formadores». Se llevó la palma Pedro Mancebo, quien tildó directamente de «tonto» a Manuel Gallud. El alcalde se lo recriminó y él recordó aquella frase de Forrest Gump: «Tonto es el que hace tonterías».

Vacaciones y capitales

Con espíritu de buen funcionario, el alcalde se despidió de la sesión con un: «Buenas vacaciones a todos», aunque él se queda. Otro detalle fue el de Bob Houliston que convirtió a Orihuela en capital. «En la costa estamos a 35 kilómetros de la capital», dijo refiriéndose a la distancia.