El grupo socialista de Guardamar del Segura tildó ayer de «medida absolutamente irresponsable» la apertura parcial al tráfico de la pinada del municipio, una decisión que achacan a la alcaldesa, Carmen Verdú (PP), al considerar que «pone en peligro» este patrimonio natural. El grupo manifestó que en el mismo día en que se ponía en funcionamiento la zona azul en las calles próximas a la playa de Guardamar, pudieron comprobar, además del «absoluto fracaso» del estacionamiento de pago, la «lamentable sorpresa de la apertura parcial al tráfico de la pinada por la calle Ingeniero Codorniu».

El concejal Eric Gilabert opinó que el cargo de regidora «no legitima ni autoriza para poner en riesgo uno de los patrimonios más importantes de este municipio», donde la total peatonalidad de sus caminos y accesos está plenamente consolidada desde hace años y ha permitido su mejor conservación.

Los socialistas, que se oponen al actual sistema de zona azul, consideran «totalmente absurda» la apertura al tráfico de la pinada y sostienen que «no puede justificarse en la decena de aparcamientos aprovechables al lado de la Casa Forestal».

Asimismo, sostuvieron que durante la tarde de ayer se encontraban centenares de aparcamientos vacíos en la zona más próxima a la playa y, en cambio, el centro estaba «totalmente colapsado».