Torrevieja, la quinta ciudad de la Comunidad Valenciana, no solo no cuenta con conexión ferroviaria sino que paga por el uso del "hueco" que dejaron las vías de la línea de tren que dio servicio al municipio durante más de un siglo. El Ayuntamiento abona anualmente 9. 839 euros al Administrador de Infraestructuras Ferroviarias (Adif) por la utilización que los vecinos y visitantes realizan del antiguo trazado del ferrocarril que unía la ciudad con Albatera y que ahora se emplea como vía verde para peatones y ciclistas a lo largo de seis kilómetros. Desde que se rubricó el acuerdo de cesión en abril del año 2000 el Ayuntamiento ha abonado al menos 90.000 euros en concepto de canon que ha pasado, con sucesivas actualizaciones del IPC, de los seis mil euros iniciales anuales, a los 9.839,04 euros actuales. Además el actual acuerdo es temporal, es decir, el municipio no cuenta con la cesión de forma permanente sino que el convenio establece un plazo de veinte años prorrogable.

Inaugurado en 1869 para dotar a la industria salinera Torrevieja perdió el enlace ferroviario que lo unía a toda la red estatal a finales de los ochenta del pasado siglo. Diez años después el Ayuntamiento pensó en recuperarlo para uso turístico. El trazado acoge desde mediados de la década pasada un sendero habilitado para el paso de peatones y sobre todo ciclistas que pueden realizar un trayecto prácticamente llano entre el barrio del Acequión y el límite con el término municipal de Los Montesinos a lo largo de seis kilómetros. En algunas zonas del trayecto también cuenta con una senda pavimentada y alumbrada que conecta unas urbanizaciones con otras.

Alicientes

La superficie propiedad de Adif es de 86.484 metros cuadrados.El municipio publicita el sendero como uno de sus alicientes turísticos -la ciudad cuenta con unos recursos de carril bici muy escasos en estos momentos-.

El recorrido pasa por distintas urbanizaciones residenciales y en paralelo a la laguna protegida de las salinas de Torrevieja. El Ayuntamiento nunca ha llegado a informar de que debe abonar un canon a Adif por un suelo que ya no alberga la infraestructura ferroviaria. De hecho, el alcalde Eduardo Dolón (PP) anunció a mediados del año 2012 que había mantenido distintas reuniones con Adif para trasladar la propuesta ciudadana avalada por más de 11.000 firmas de que la ciudad recupere su conexión ferroviaria. Campaña realizada a instancias de Los Verdes.

La ciudad perdió casi definitivamente el tren de la conexión ferroviaria a mediados de la década de los 2000 cuando fracasó el intento de los alcaldes de los municipios de la primera y segunda línea de playa y los grupos empresariales inmobiliarios más poderosos de la comarca de que el Ministerio de Fomento adoptara el denominado trazado "supersur" del AVE para conectar Elche con Murcia y optó por el que se está construyendo ahora por el interior de la Vega Baja. Tampoco ha cuajado la puesta en marcha de una "vía express" en paralelo a la Nacional-332 que conecte Alicante y el litoral sur de la provincia.