El proyecto se inscribe dentro del plan Moderniza 6.0 que tiene "enganchados" a más de 140 municipios de la provincia y que pasará a denominarse Moderniza 7.0. Una de las mejoras que supone es que los ayuntamientos podrán tener una utilización de banda ancha en función de sus necesidades sin depender de empresas externas y con precios más asequibles que se conocerán a través del concurso.

La empresa que se lo adjudique tendrá que invertir 1,5 millones de euros aproximadamente y garantizar el mantenimiento. A cambio, tendrá una concesión por un tiempo estimado de diez a quince años. Según Ballester, los ayuntamientos podrán modular su ancho de banda a medida que aumente el tráfico de datos que quieran manejar porque la administración local abre ya puertas las 24 horas del día a través de los registros virtuales. Contar con funcionarios trabajando desde cualquier sitio o consultado sus expedientes gracias a internet es una posibilidad más que real en estos momentos y con más fiabilidad. Al ser un sistema compartido los costes se abaratarán. Ballester destaca que "la red proporcionará a cada municipio un canal de comunicaciones de banda ancha, fiable y seguro, con velocidad de transmisión garantizada, adecuado para satisfacer sus necesidades de servicio presentes y futuras. El diseño será flexible, permitiendo ampliaciones de velocidad sin necesidad de reinversión".