El Servicio Provincial de Costas de Alicante comenzó ayer a reparar los desprendimientos de tierra y rocas en un talud de la parte norte del acantilado de la Cala de la Higuera. El acondicionamiento consiste en retaluzar los 15 metros lineales de desprendimiento en la parte superior, reperfilando el borde de tierra que ha quedado actualmente, y utilizando parte del material desprendido. La actuación se ampliaría si fuese necesario con la aportación de material, "para rellenar la grieta y que quede la zona totalmente estabilizada", según explicaron ayer fuentes del equipo de gobierno.

Como recogió esta edición, la Cala de la Higuera sufrió el pasado diciembre un desprendimiento a escasos metros de las hilera de chalés de la zona. Según explica el Ayuntamiento las causas de este desprendimiento, "podrían atribuirse a las abundantes lluvias registradas en los últimos meses o a los temporales que azotaron la costa en ese tiempo". Tras ser detectado este derrumbe por los servicios de vigilancia de la Concejalía de Playas, de la que es responsable Antonio Boix, se procedió "inmediatamente" a la instalación de un vallado preventivo y el alcalde, Eduardo Dolón (PP), trasladó lo sucedido al Servicio Provincial de Costas de Alicante, dependiente del Ministerio de Medio Ambiente. Ésta respondió alertando al Ayuntamiento que hasta que no se actuase en la zona era la administración local la responsable a la hora de mantener la seguridad de las playas y los acantilados, según la ley de Costas. La jefa del Servicio Provincial, Rosa de los Rios Jimeno, esgrimió el artículo 115 de la Ley de Costas que indica que es competencia municipal "mantener las playas y lugares públicos de baño en las debidas condiciones de limpieza, higiene y salubridad, así como vigilar la observancia de las normas e instrucciones dictadas por la Administración del Estado sobre salvamento y seguridad". Aunque finalmente Costas ha asumido la reparación.

Competencias

El Ayuntamiento puntualizaba ayer que la zona afectada, protegida por la Ley de Costas, "es de dominio marítimo terrestre y, por tanto , las competencias exceden la responsabilidad municipal". Costas también alertaba en el citado escrito de otros desprendimientos que se han producido en otras zonas, como en la Cala Piteras, situada al sur del litoral del término municipal torrevejense, y pedía que se pusieran en marcha medidas de seguridad para acotar el paso de visitantes.