Cientos de vecinos de toda la Vega Baja se concentraron ayer en la plaza del Ayuntamiento de Albatera para mostrar su rechazo a la posible ubicación del macrovertedero de la comarca en la sierra de este municipio.
Fue el primer gran acto de protesta organizado por la plataforma cívica "Albatera no al vertedero" y la respuesta de los ciudadanos fue masiva. Por primera vez fuera del salón de plenos, los tres partidos con representación en la localidad (PP, PSOE y Coalición Valenciana) escenificaron juntos su rechazo a la ubicación de esta planta y exigieron que se paralice un proceso de adjudicación sobre el que planea la sombra del caso Brugal.
"Esta lucha no es solo nuestra, debe plantearse como un reto de toda la ciudadanía, políticos, asociaciones y colectivos de la Vega Baja. Este es un problema de todos, que nos afecta a todos y que solo resolveremos entre todos". Con estas palabras arrancó ayer su intervención la portavoz del movimiento ciudadano, Lourdes Pérez, quien repasó los perjuicios para la salud y para el medio ambiente que causaría la construcción de una planta a la que llegarían durante los próximos 20 años todos los residuos de la comarca.
Al estrado instalado junto a la puerta del Consistorio subió también el vicepresidente de la plataforma Vertivega, Alfredo Sigüenza. El colectivo que lucha contra las presuntas prácticas irregulares del vertedero de Proambiente en la pedanía oriolana de La Murada ha prestado apoyo y asesoramiento a la plataforma albaterense desde que hace pocas semanas surgiera de forma espontánea a través de la redes sociales.
"No vamos a consentir decisiones políticas preñadas de corrupción" porque "nosotros más que nadie sabemos lo que es vivir al lado de un vertedero", exclamó Sigüenza.
Asimismo, numerosos representantes y miembros de asociaciones vecinales, culturales, ecologistas y vecinos a nivel particular se presentaron en la plaza para mostrar su apoyo a la causa.
Luchar
El alcalde de Albatera, Federico Berná (PP), también subió al estrado arropado por la totalidad de la corporación municipal y recordó que la construcción del macrovertedero no sólo afectaría a Albatera, sino a numerosos pueblos y pedanías ubicadas en los alrededores. "Todos vamos a luchar para que no se convierta en una realidad", exclamó el primer edil.
Hasta la misma plaza se acercaron también numerosos políticos de la comarca, gran parte de ellos socialistas como los regidores de San Isidro, Los Montesinos y Rafal, la diputada Ana Belén Juárez o los portavoces de esta formación en Torrevieja, Catral o Dolores.
Es precisamente el PSOE de la Vega Baja el partido que durante las últimas semanas ha venido exigiendo a la presidenta de la Diputación y del Consorcio Provincial de Residuos de la Zona XVII (Vega Baja), Luisa Pastor, que se disuelva el proceso de adjudicación por estar plagado de irregularidades. En la concentración también se pudo ver al coordinador de Compromís en la provincia, Natxo Bellido, o a la coordinadora comarcal de EUPV en la Vega Baja, María Jesús Pérez.
No asistió sin embargo ningún otro alcalde del PP de la Vega Baja, algo que muchos echaron en falta, ya que el Consorcio que decidirá si la basura de toda la comarca acabará o no en Albatera está representado en un 15 por ciento por la Diputación, un 25 por la Generalitat Valenciana y el resto por representantes de los 27 municipios de la Vega Baja.
