Ni la gasolina. Romymar dejó en la estacada a siete mercantiles de Torrevieja subcontratadas en las obras de la reurbanización Nueva Torrevieja al presentar concurso de acreedores. Empresas que no han cobrado ni un euro de los 600.000 que les debe la mercantil adjudicataria de este proyecto del Plan Confianza, cuyo objetivo era dar trabajo en plena crisis. Es más, la Conselleria de Infraestructuras ha autorizado ceder la actuación a otra empresa, Los Serranos, para que las retome sin mediar concurso público y con los contratos de las mercantiles torrevejenes todavía vigentes con Romymar, que abandonó la zona "patas arriba" en mayo pasado. La Generalitat ha permitido que la partida presupuestaria que resta del proyecto termine en manos de otra mercantil pero las subcontratas que intervinieron en la primera fase no pueden cobrar lo que sí ingresó Romymar porque esa empresa está en fase de concurso de acreedores y cualquier ingreso está retenido hasta que se resuelva el procedimiento judicial.

Por ejemplo, Romymar, que cobró hasta la última certificación, adeuda todo el combustible con la que se movía la maquinaria, no ha pagado ni el alquiler de la oficina que arrendó e incluso alguna de las mercantiles se hicieron cargo de gastos de personal adscrito a la mercantil en quiebra.

Medidas de presión

Las subcontratas, según fuentes conocedoras de procedimiento, tienen previsto emprender acciones legales contra la Generalitat que ha permitido que la adjudicataria inicial de la obra, tras presentar concurso de acreedores, la cediera a Los Serranos sin que haya mediado un nuevo concurso público y prescindiendo de las subcontratas iniciales. Además tienen previsto llevar a cabo medidas de presión como una manifestación en Valencia con vehículos e incluso se plantean paralizar la obra en Nueva Torrevieja tras el reinicio estos días del proyecto por parte de la nueva responsable de la actuación. Las empresas, según fuentes municipales, valoran el papel realizado por el Ayuntamiento, al dar la cara en este asunto ante la Generalitat, pero advierten que no se van quedar quietas a la hora de exigir lo que es suyo. Las empresas incluso plantearon sin éxito hacerse cargo de la finalización de las obras presupuestadas en 1,9 millones de euros.

Rebajar la inversión para tener margen

Una nueva empresa ha retomado las obras de remodelación de Nueva Torrevieja. Según fuentes conocedoras del proyecto, para aceptarla, ha pactado con el Consell rebajar calidades previstas y así contar con el margen industrial que desapareció con el parón de cinco meses en la actuación y las deudas. Algo que repercutirá directamente en el resultado de la remodelación de este barrio residencial, ya de por sí discreto en el plan original. De momento, el Ayuntamiento puede rebajar las quejas vecinales que lleva aguantando durante meses. D.P.