La concejala no adscrita de Orihuela Asunción Mayoral accedió ayer a los expedientes de traslado de personal del Ayuntamiento que había solicitado a su sucesora en el cargo, Marta Campillo (CLr), y con los que quería conocer si algunos movimientos de funcionarios se habían decidido a modo de castigos o recompensas y no por criterios objetivos. La edil de Personal había concedido 30 minutos la pasada semana pero llegó tarde a su cita y tuvieron que volver a quedar ayer.

Mayoral señaló tras revisar al documentación que "en septiembre se produjeron 13 traslados, otro en julio y en agosto por decreto se ascendió a un miembro de las brigadas a encargado, lo que generó malestar porque no había criterio para no escoger a otro". En septiembre "todos están argumentados en "necesidades organizativas", pero sorprende que por ese motivo se cambie a una persona de puesto y después se traiga a otra persona a ocupar su vacante", reflexionó la edil.

Mayoral añade que "hay algún caso en que el funcionario ha hecho constar en la diligencia de notificación que no se le ha justificado el motivo del traslado, y en otros casos cuando se notifica al concejal que se va a mover a alguien de su área ha hecho constar que se negaba". ¿La lectura positiva? Según la edil que "desde que yo pedí el 3 de octubre acceder a la información no se ha hecho ningún nuevo traslado", dijo.