El equipo de gobierno del Ayuntamiento de Orihuela -PSOE, CLr-Claro y Los Verdes- ha solicitado a la Presidencia de la Generalitat Valenciana información sobre la situación legal en la que se encuentra la televisión de Ángel Fenoll, Canal Vega Televisión, con el objeto de iniciar un expediente que podría llevar al cierre al carecer de una de las licencias que en 2006 dio el Consell. Fuentes de la mercantil de la comunicación local se mostraron ayer sorprendidas por la iniciativa emprendida por el tripartito y manifestaron desconocer cuál es el proceso que pretende llevar a cabo el Ayuntamiento y el objeto del mismo, principalmente, después de que hayan transcurrido seis años sin que hasta ahora les hayan puesto trabas a su funcionamiento.

El equipo de gobierno se ha aprovechando, precisamente, de una reciente sentencia del Tribunal Supremo, en el caso TeleElx -la emisora ilicitana que tampoco tenía la concesión- por la cual se decreta la nulidad de esta adjudicación de concesiones, realizadas en enero de 2006 en medio de una viva polémica porque supuestamente se benefició a mercantiles que ni tan siquiera tenían presencia en la Comunidad Valenciana o no habían acreditado experiencia en el sector audiovisual por delante de otras que llevaban años trabajando y que, precisamente, habían visto en este procedimiento una fórmula para regularizar su situación tras años de espera.

Posible

En el caso de Orihuela, las tres concesiones fueron parata Homo Virtualis, Audivisual Editores y Televisión Orihuela. Esta última, con el nombre de Canal Vega, es propiedad de Fenoll.

La concesión o denegación de permisos para este sector está regulado por la Generalitat Valenciana y obviamente es la única que puede permitir la emisión de una señal. Con el escrito remitido por el Ayuntamiento se obtienen dos cosas. Por un lado, dar a conocer de la existencia de Tele Vega Baja emitiendo a día de hoy y de que su propietario es Ángel Fenoll, hecho que no es desdeñable vistas las implicaciones políticas derivadas del caso Brugal, que investiga la adjudicación de las basuras en Orihuela o del Plan Zonal por la Diputación, provincial, entre otros asuntos; y, del otro, tener que pronunciarse sobre esta situación cuanto menos anómala.