La noruega herida pensó que había demasiado peso en el vagón antes de que se pusiera en marcha la atracción. Así lo explicó ayer su marido en la habitación del Hospital de San Juan donde permanece ingresada. "Me siento fatal" fue la única frase que pudo articular la afectada, que responde a las iniciales de A. H., mientras permanecía tumbada con varios vendajes. La herida presenta cortes en el cuello, en la cara y el abdomen, ya que, al volcar el tren en el que viajaba su cuerpo chocó contra el raíl. "Es una herida muy peligrosa porque está a milímetros de la yugular", explicó el marido de la afectada. Sin embargo, se encontraba estable, a la espera de conocer los resultados de una radiografía de mandíbula y de un TAC, ambas pruebas realizadas durante el día de ayer.

Los familiares de la mujer de 28 años de edad, que la acompañan en la habitación del centro hospitalario, achacan la causa del accidente a un exceso de peso en el coche en el que viajaba. "Había cuatro personas sentadas en el mismo vagón, mi mujer, mi hijo y dos personas más. "Demasiado peso", pensó mi mujer", declaró el marido. No obstante, el pequeño salió ileso del incidente.

Además, los familiares y la víctima, que se encuentran de vacaciones en la provincia, manifiestan que la situación que vivieron momentos después del accidente fue "caótica" por el gentío que se formó. Pero a pesar del infortunio, se sienten muy agradecidos por el buen trato que han recibido de la Policía Local y de los trabajadores del hospital: "Son muy amables".

En un primer momento, además de recibir atención sanitaria, los agentes locales tomaron nota de sus datos personales para instruir diligencias sobre el caso.