Gonzalo Abellán Sáez lleva más de tres años trabajando en su tesis doctoral, que gira en torno a la investigación de materiales y la transformación de sus propiedades a través de estímulos externos. Estos estudios pretenden elaborar una serie de materiales que se utilizarán en la electrónica del futuro: la espintrónica. Por ello, su trabajo ha sido reconocido por la Sociedad Europea de Investigación de Materiales, la cual le ha dado el premio al mejor investigador joven.

¿Cuál es el objeto de su estudio?

El objetivo fundamental es elaborar materiales artificiales, que no existan en la naturaleza de forma natural, modificándolos químicamente a través de factores externos como la luz, para abrir nuevas puertas en campos como la espintrónica. Además, el desarollo de estos materiales también tendría un gran uso en cuanto a nuevos métodos de almacenamiento de datos, pues el silicio, el material que se usa actualmente, ya ha alcanzado el tope de sus capacidades.

¿Qué aplicaciones prácticas se obtienen de sus investigaciones?

El desarrollo de la espintrónica será determinante en el futuro. Sin embargo, algunos de sus usos ya son una realidad, como la optimización del almacenamiento de energía. Muchos coches eléctricos incorporan esta tecnología en las clásicas batería de litio, con lo que se obtiene un mayor rendimiento.

Comentaba antes su uso en el almacenamiento de datos. ¿Estamos ante los "discos duros del futuro"?

Es posible. Empresas como Intel se encuentran buscando nuevas formas de almacenaje. La modificación de las propiedades magnéticas de los materiales nos permite obtener una capacidad de almacenamiento mucho mayor, ya que sería posible guardar gran cantidad de datos en un mínimo espacio.

¿Se trata de un proceso muy costoso a la hora de ponerlo en práctica?

No. Al tratarse de una modificación de las propiedades a nivel químico, y no físico o material, el coste es mucho menor.

Entonces, ¿por qué se tarda tanto en extrapolar los resultados desde papel?

El mayor problema es que existen muy pocas empresas en España que apuesten por la investigación o la innovación, a pesar de que tengamos a grandes investigadores. Cuando realizas algún descubrimiento y quieres llamar a cualquier empresa para ofrecerle tu trabajo, te encuentras con que las opciones son muy limitadas.

¿Esta situación es distinta en otros países de la Unión Europea?

Completamente. De hecho, nosotros tenemos actualmente una patente solicitada por tres empresas para licenciarla, todas extranjeras. Al final nos encontramos con que todo el trabajo desarrollado por científicos españoles acaba en manos de otros. Es como si metiéramos el dinero en un saco y nos lo llevamos a otro sitio. España debe apostar por el desarrollo de la investigación.

Sin embargo, el dinero destinado por el Estado a este fin, se ha reducido...

Los recortes en investigación son un auténtico disparate. Nos encontramos en un momento en el que el país debe producir para salir de la difícil situación económica. Invertir en avances científicos es invertir en el futuro. Con el desarrollo del turismo y la huerta no vamos a salir de la crisis. El progreso es el que puede hacer que salgamos adelante. Si recortamos en lo único que puede darnos soluciones, no hay salida. Está demostrado que cualquier revolución económica y social ha sido causa del avance del conocimiento. La salida de las crisis, como ocurrió en el 29 en Estados Unidos también se llevó a cabo gracias a esto. El avance es la mejor arma que tenemos para salir de la crisis.