El abogado de la familia que denunció al Hospital de Torrevieja por el fallecimiento de la niña de cinco meses Lucia Moller por una supuesta negligencia médica, pedirá la imputación de los responsables directos de la médico que atendió al bebé y que ejercía sin el título en el área pediátrica de Urgencias del centro. La facultativa, imputada por homicidio imprudente, de nacionalidad argentina, solicitó la homologación de su título, sin conseguirlo, dos meses después de que se interpusiera el procedimiento penal.

La pequeña Lucía, de cinco meses, falleció en febrero de 2011 tras lo que sus padres denunciaron como "un cúmulo de negligencias médicas". El bebé, con una dolencia cardiaca congénita, ingresó en el hospital con el corazón encharcado y comenzó a mejorar hasta que "una enfermera le suministró la medicación por vía intravenosa cuando tenía que ser oral", siempre según la denuncia. El empeoramiento fue progresivo desde ese momento, mientras según los padres la médico se negaba a trasladarla al Hospital La Fe y falleció "a causa de un virus".

Los padres de la niña fallecida, Andrés Moller y Libertad Loro, tienen previsto hoy acudir al juzgado a prestar declaración por este asunto. El letrado de la familia José Martín aseguró a este diario que en el centro siguen ejerciendo médicos en especialidades sin su título homologado y avanzó que va a solicitar la comparecencia del actual gerente del Hospital.

Desde que el pasado mes de julio la facultativa imputada declarara en los juzgados, cinco trabajadores del centro han sido interrogados en calidad de testigos por este asunto. Una cardióloga, la entonces jefa de Pediatría, una supervisora de Enfermería y dos enfermeras. Según la interpretación de la acusación todos han desmentido en sus declaraciones, una a una, las principales argumentaciones de la facultativa para justificar su actuación.

Traslado

La médico mantuvo que había contactado con la cardióloga y con la jefa de Pediatría para informarles del estado de la niña e incluso de la necesidad de un traslado. Ambos especialistas, según las mismas fuentes, aseguraron que la imputada no supo distinguir los síntomas de la enfermedad y que no fue hasta el final del día cuando les planteó actuar y el traslado del bebé hasta el Hospital La Fe. Además a las diligencias se ha aportado una certificación de la empresa de ambulaciones asegurando que éste traslado se solicitó sobre las nueve y veinte de la noche, veinte minutos antes del fallecimiento de la paciente y, no horas antes, como al parecer, mantenía la médico.

Este caso y otros dos de similares características propiciaron la presentación de 6.000 firmas para que se investigaran supuestas negligencias médicas en el área de Pediatría del Hospital, una concesión de la Generalitat a una gerencia privada.