Los agricultores lo tienen complicado este año para sacarle rentabilidad a los limones. El precio que hoy en día están pagando los exportadores es solo un tercio de lo que cuesta producir el fruto, y eso en el mejor de los casos, porque incluso hay regantes que están regalando su mercancía a cambio de que les dejen los limoneros limpios. "Conozco casos en los que están dando vía libre para que se lleven sus limones sin darles nada a cambio, sin más" dice el secretario comarcal de la Vega Baja y responsable de cítricos del sindicato agrario La Unió, José Manuel Pamies, quien además confirma que las mejores ofertas que están recibiendo los productores de este fruto son seis céntimos por kilo, una cantidad que estuvo generalizada en diciembre y que ahora va cayendo progresivamente. Hasta el punto de que los frutos se están dejando perder en los árboles y ya comienzan a verse por los suelos literalmente, porque no merece la pena ni siquiera recogerlos en algunos casos.

Un productor particular consultado por este diario que posee una parcela de más de 300 tahúllas en Los Montesinos (el equivalente a 355.000 m2) explicó que quienes como él han plantado la variedad "fino-mesero" esperarán unas semanas -pueden aguantar hasta mediados de mayo- para ver si los precios remontan: "No se están cogiendo limones porque Turquía los está vendiendo muy baratos", señaló. Y es que el principal competidor en este mercado para los españoles es el campo turco (de hecho, las heladas de hace un par de años en ese país permitieron a los agricultores de la comarca vender a 0,48 euros, ocho veces más que en esta temporada).

Otros exportadores potentes de cítricos son Marruecos y Argelia, aunque con menor incidencia, y Argentina, que sí estuvo muy en auge hace unos años pero que ya supone menos amenaza comercial porque incrementó sus precios al subir los aranceles y porque el traslado de la mercancía en barco se demora varias semanas y la fruta llega "tocada".

Frío

Para que los precios que recibe el regante suban, tristemente los agricultores del sur de Alicante solo pueden esperar a que haga mal tiempo en Europa: El frío siempre dispara la demanda de cítricos y hortalizas (los principales destinos de los limones alicantinos son Noruega, Alemania, Holanda, Inglaterra o Rusia, señalan las mismas fuentes). Aún así, queda una alternativa aún más desmoralizante que ya se comenta en el sector: "Algunos están llegando a decir que al menos si hay aquí una helada podrán cobrar los seguros", señalaron desde La Unió. Lo que ocurre es que la situación es crítica, señala Pamies, y el panorama va año a año a peor.

¿Hay solución? Para Pamies la salida pasa necesariamente por la organización sel sector: "Somos muchas empresas, muchos comercializadores ofreciendo el producto, y enfrente son pocas pero grandes cadenas europeas que nos imponen sus precios y nosotros, los productores españoles, no tenemos la suficiente unión para negociar, ni los exportadores pueden dejar de venderles", reflexiona. Eso, y que "debería estar prohibido vender por debajo del coste porque de ese modo acabamos con el campo", añadió.

Según los datos que maneja el sindicato, la provincia de Alicante produce el 30% de los limones de toda España, y los cítricos son un porcentaje muy alto de la extensión de huerta de la Vega Baja, donde muchas familias ya han abandonado el cultivo en los últimos cinco años ante los "precios desastrosos" y la perspectiva de que irá a peor.

Variedades

Si la variedad "fino-mesero" tiene aún una oportunidad porque puede quedarse unas semanas en el árbol, la que sí está perdida y "nadie la quiere" es la "macrofila" (más temprana, que comienza a recogerse entre octubre y noviembre y acaba en diciembre), la que se compra para triturar para hacer zumos o productos industriales. En este caso, se vende a seis céntimos si el agricultor la entrega ya en cajas y a tan solo dos por kilo si el exportador tiene que cosecharla (pero dura pocos días y no llega bien a destinos alejados en Europa). Antes los limones "macrofila" estaban "primados" por la Comunidad Europea y se llegaban a vender a 18 céntimos.

Los de variedad "verna", continuó explicando el experto, salvaron para muchos la campaña del año pasado, porque se vendieron a 0,30 euros y tienen su floración en marzo. Se pueden coger hasta mediados de mayo, pero "cuajan un 10-20% mientras que el "fino-mesero" saca un 80%", explican las mismas fuentes.

"El jornal de un día aquí es el de un mes en Argelia o Marruecos"

El sector agrícola español no puede competir con los precios de Turquía, Marruecos o Argelia, porque "el jornal de un día aquí es el de un mes en esos países". La importación del norte de África afecta directamente a los agricultores locales, y alguno no dudó en señalar a este diario que los camiones de naranjas de Marruecos llegan a Europa por las carreteras españolas, por lo que el Gobierno debería negociar en favor de sus regantes. En el mismo sentido, desde La Unió aseguraron que Turquía concede ayudas económicas encubiertas a los productores de limones, lo que se traduce directamente en que bajan los precios por debajo de los costes de producción y "compensan" con la subvención. Con esa herramienta tampoco pueden jugar los alicantinos, a quienes además Conselleria debe desde hace dos años las ayudas a la modernización de plantaciones y regadío, añadió. e. g. b.