La fuente de la Glorieta funciona prácticamente a pleno rendimiento después de algo más de dos meses parada para que la brigada municipal realizara algunas reparaciones. La actuación se ha tenido que acometer principalmente en la conducción de agua, que tenía fugas desde hace años según fuentes del Ayuntamiento, una circunstancia que estaba perjudicando progresivamente a todo el funcionamiento de la fuente.
Quienes han paseado estos días de Navidad por La Glorieta han podido ver ya el baile de chorros de agua, las luces y eventualmente la música en funcionamiento, aunque según el consistorio será la próxima semana cuando se dé por finalizada definitivamente la reparación.
Precisamente este fin de semana se detectó la rotura de una bomba en el sistema de propulsión del agua y hubo que acudir de urgencia a un electricista, aunque al margen de algunos gastos menores que ayer no supieron precisar desde el Ayuntamiento todos los trabajos los ha acometido la brigada municipal.
El deterioro de la fuente se hizo evidente para el Ayuntamiento cuando el equipo de gobierno decidió rescindir el contrato de mantenimiento que tenía por unos 1.700 euros al mes con la empresa "HV Ingenieros". El concejal Pedro Mancebo señaló ya en octubre que la factura mensual se pagaba básicamente, aseguró, "por darle a un botón" para encender y apagar la fuente, un botón que de hecho se activaba a distancia desde las instalaciones de la propia mercantil según añadió ayer el asesor de Infraestructuras del Ayuntamiento, Ángel Noguera, quien también señaló que se está trabajando en sincronizar ese control remoto para que la fuente pueda reproducir coreografías de luz, música y movimiento de agua.
El cierre de la fuente se decidió días después de asumir su mantenimiento, cuando desde el Ayuntamiento se detectó que era necesaria una reforma urgente porque el sistema estaba "a punto de romperse". Desde entonces la emblemática instalación ha estado cerrada con vallas y después parcialmente abierta, mientras ha durado la reparación.
