El área de Personal del Ayuntamiento de Orihuela ha reactivado unas oposiciones a policía local que convocó en enero la anterior edil de Seguridad, Mayte Valero (PP) y que buscan cubrir 31 plazas, 10 de ellas por concurso de movilidad y otras 21 por oposición libre. En la segunda modalidad se han inscrito 1.699 personas, aunque 66 han sido rechazadas por defectos formales en la presentación de su solicitud. Así, 1.633 aspirantes competirán para hacerse con una de las 21 plazas en propiedad: Son 78 candidatos para cada vacante. En el concurso de movilidad hay exactamente cien aspirantes para trasladarse a Orihuela desde otras jefaturas.

El Ayuntamiento ha ingresado por tasas por derecho a examen casi 22.000 euros (12,02 euros por cada opositor) y aún no ha fijado la fecha de la primera prueba, dado que aún no se ha cumplido el plazo para alegar a la lista provisional de admitidos y excluidos. En cualquier caso, el proceso de selección según se definió en el Boletín Oficial de la Provincia de Alicante comprende cinco pruebas para el concurso de movilidad (psicotécnico, reconocimiento médico, valoración de méritos, prueba sobre el callejero y el término municipal, y una entrevista personal) y siete exámenes para la oposición libre (psicotécnico, pruebas físicas, cuestionario, desarrollo del temario, ejercicio práctico, traducción de un texto del inglés al español y otro al revés, y reconocimiento médico).

Algunos de los aspirantes a lograr una plaza en propiedad en la plantilla de la Policía Local de Orihuela coinciden con los que están esperando que el Ayuntamiento reanude otra oposición con las mismas características paralizada hace más de dos años por la sospecha de una filtración del examen tipo test. Son 150 opositores los que aún no saben su nota de aquella prueba, pese a que el juez archivó la denuncia al no poder esclarecer quién había cometido el delito de enseñar el cuestionario a algunos de los aspirantes. La investigación partió de la denuncia del secretario municipal y presidente del tribunal de la oposición, que corrigiendo exámenes observó que los interinos acertaban una serie de preguntas que los demás no habían sabido contestar.

La actual edil de Personal, Asun Mayoral (CLr), no ha tomado aún ninguna decisión sobre cómo reanudar aquel concurso asegurándose de que los 150 opositores que aún tenían posibilidades de ganar una de las 21 plazas en propiedad se enteren de que se reanuda el proceso selectivo y no haya motivos para impugnarlo. Aunque el anterior equipo de gobierno decidió que retomaría la oposición en el punto que se quedó -es decir, en la prueba siguiente al tipo test-, Mayoral señaló hace algunas semanas que no descarta reiniciar el proceso con tal de garantizar la igualdad de posibilidades de acceso.