La Policía Nacional ha detenido a nueve personas supuestamente implicadas en la desaparición y retención contra su voluntad de una joven de 13 años el pasado 30 de julio y que ha sido hallada en una urbanización de Orihuela un mes después. Fuentes policiales informaron ayer en un comunicado del proceso que siguieron para localizar a la joven que responde a las iniciales A.E.C y que ha culminado con la vuelta a casa de la menor y la detención de nueve personas, entre ellas su novio, un militar de origen colombiano y la madre de éste.

La investigación, que ha llevado por nombre "Operación Las Yucas", comenzó con la denuncia de los padres el pasado 31 de julio en la que alertaban de que su hija se había marchado de casa y se había llevado una mochila con sus efectos personales.

En la denuncia, los padres de la menor ya expresaron ante los agentes sus sospechas de que su novio, un militar de origen colombiano de 24 años, podría estar detrás de la desaparición de la joven.

Los agentes trataron en un primer momento la investigación como un caso de desaparición voluntaria, pero a medida que pasaba el tiempo sin recibir noticias de la joven cobró fuerza la hipótesis de que podría estar retenida en contra de su voluntad por su novio y conocidos en un lugar desconocido en esos momentos por los agentes .

Por eso, a continuación, se comenzó a investigar al novio de la joven,O.O.M., ya que "en las primeras declaraciones intentó obstaculizar la investigación policial, negando tajantemente que mantuviera una relación sentimental con la menor" y presentaba coartadas que imposibilitaban que en el instante de la desaparición hubiera podido participar en la misma.

Por este motivo, los agentes de la Policía Nacional decidieron ampliar el círculo de sospechosos a sus familiares y amigos íntimos del militar colombiano, ya que consideraban que era completamente "inadmisible" que la desaparición pudiera haber sido planificada solamente por una persona.

Rescate

Tras una amplia investigación y el despliegue del dispositivo policial, el 25 de agosto los funcionarios del Grupo de Delincuencia Especializada y Violenta de la Comisaría del Puerto de Santa María (Cádiz) descubrieron el paradero exacto de la menor en una vivienda situada en la urbanización Villamartín en la costa de Orihuela. Allí los agentes comprobaron que la menor estaba privada de libertad, con las puertas y ventanas cerradas bajo llave, siendo necesario la intervención del cuerpo de bomberos para liberar a la niña, que tuvo que ser rescatada a través de una ventana.

Eludir la responsabilidad

Tras su localización detuvieron a cinco personas implicadas en los hechos de la localidad de El Puerto de Santa María, O.O.M, S.M.M, G.C.L, E.C.L ,S.B.G. La Policía señala que en un principio la menor abandonó su domicilio de manera voluntaria, pero después fue su novio, O.O.M, quien decidió que se le fuera limitando su libertad. El objetivo del cabecilla era "ocultar la relación que mantenía con la menor y de esa forma eludir su responsabilidad penal". La menor ha manifestado que desde el primer momento de su huida intentó contactar con sus padres para tranquilizarlos, pero no pudo.

El Grupo de Delincuencia Especializada y Violenta de El Puerto de Santa María (Cádiz) logró identificar a las cuatro personas que materializaron la "detención Ilegal" de la menor en Orihuela y que responden a las iniciales G.O.V, C.O.V, I.L.F y C.R.F.