Las fosas comunes que contienen los restos de cientos de republicanos, fusilados tras la Guerra Civil por el Franquismo en el campo de concentración de Albatera -actual término municipal de San Isidro-, no se encuentran catalogadas en el Mapa de Fosas Comunes que recoge la Ley de la Memoria Histórica. El documento localiza un total de 2.246 enterramientos, pero no el de San Isidro, que es uno de los mayores del Estado y donde se calcula que pueden haber más de 200 fusilados. Asimismo, el documento realizado por el Ministerio de Justicia incluye un error en la fosa del Cementerio de Orihuela, ya que su ficha de catalogación explica que los republicanos fusilados en este municipio fueron trasladados al Valle de los Caídos en 1959, aunque sólo habla de dos personas. Sin embargo, la Comisión por la Memoria Histórica de Orihuela y Alicante calcula que en la fosa oriolana se encuentran los restos de 14 republicanos que fueron fusilados el 17 de noviembre de 1939.

Esta Comisión ya anunció en 2010, meses antes de que se hiciese público el Mapa de Fosas Comunes, una iniciativa tendente a redactar un dossier de denuncia para ser remitido a la Audiencia Nacional a fin de que se abriera una investigación para determinar el lugar exacto de los enterramientos y el número de personas sepultadas en el campo de concentración de Albatera para que los cuerpos fueran exhumados. Previamente estos colectivos se dirigieron al entonces juez de la Audiencia Nacional, Baltasar Garzón, sobre esta cuestión y para que fuese investigada la fosa común del Cementerio de Orihuela "ante la falta de interés de los juzgados provinciales".

El Mapa de Fosas Comunes, elaborado por el Ministerio de Justicia, sí recoge otros enterramientos de republicanos en otros puntos de la provincia. Entre ellos figuran los de Jijona, Ibi, Hondón de las Nieves, Guardamar del Segura, Bigastro, Benejúzar y Alcoy. Los restos humanos allí encontrados fueron trasladadas al Valle de los Caídos en la Posguerra. La provincia donde más fosas comunes se han detectado por el Ministerio de Justicia es Alicante, con 21. Todas, excepto una, están ubicadas en los cementerios municipales y en ningún caso han sufrido algún tipo de exhumación. En la única fosa alicantina que se encuentra fuera de un camposanto las cinco personas allí enteradas fueron trasladadas al Valle de los Caídos en 1959.

EU exige que se subsanen los errores

La diputada de Esquerra Unida (EU), historiadora y miembro de la Asociación Guerra y Exilio (AGE), Esther López Barceló, califica el Mapa de Fosas del Ministerio de Justicia como "incompletísimo ya que no se corresponde con la realidad". A su parecer, "no sabemos de qué manera se ha hecho y en lo que respecta a la provincia de Alicante hay errores de gran calado". Barceló lleva años investigando sobre el campo de concentración de Albatera y el próximo año publicara un libro sobre él. Señala que éste contiene "la mayor" fosa común de la provincia. "A los propios republicanos presos les obligaban a cavar las zanjas y una vez terminada eran fusilados allí mismo y enterrados", explica.

Además de los restos humanos que pueden haber dentro del recinto que ocupó "el campo de exterminio", tal y como lo define, la diputada apostilla que, cómo habían presos republicanos de toda España, los franquistas venían a llevárselos. Barceló añade que en algunos casos les daban un "paseíllo y los fusilaban" por los alrededores, lo que le lleva a pensar que hay muchos cuerpos más sepultado en la zona. La diputada de EU anunció que desde su formación política se realizarán las medidas parlamentarias necesarias para que tanto los errores del campo de concentración de Albatera como del Cementerio de Orihuela sean subsanados por el Ministerio de Justicia. E.D.G.