Las diligencias abiertas por el caso Lucía Moller comenzaron ayer en los juzgados de Torrevieja con la declaración de la médico imputada por un supuesto homicidio imprudente. Mientras el interrogatorio se llevaba a cabo, la familia de la pequeña junto a decenas de personas se congregaban a las puertas exigiendo "justicia y una zona de Pediatría segura en el hospital torrevejense". Lucía, de cinco meses, falleció en febrero pasado tras lo que sus padres denunciaron "un cúmulo de negligencias médicas". La pequeña ingresó en el hospital con el corazón encharcado y comenzó a mejorar hasta que "una enfermera -también imputada en la causa- le suministró la medicación por vía intravenosa cuando tenía que ser oral", denuncian los padres. A partir de ahí, según relatan, "Lucía no hizo más que empeorar mientras la pediatra se negaba a trasladarla al Hospital La Fe tal como le reclamábamos hasta que falleció a causa de un virus".
Durante su declaración, que se prolongó cerca de tres horas, la médico, siempre según el letrado de la familia Moller, reconoció que en el momento de la muerte de Lucía no tenía su titulación homologada: "Ni la carrera de Medicina, ni la especialidad de Pediatría ni el MIR, aquí en España y continúa hoy en día sin tenerlas". La familia exige que se asuman responsabilidades por parte de la gestora privada (Ribera Salud) del Hospital Público: "Tanta culpa tiene ella por ejercer con un título que no tiene como quien contrata a alquien para que ejerza un cargo a sabiendas de que no está preparado, que es lo que ha pasado con mi hija, que se les ha ido de las manos", indicaban ayer Andrés Moller y Libertad Loro, los padres.
Además, según la defensa, la imputada, de origen argentino y que tenía un contrato temporal en el Hospital de Torrevieja, en el que ya no ejerce, reconoció que la niña se encontraba en un estado "muy grave" y que el hospital "carecía de los medios para curarla", motivo por el cual los padres insistían en el traslado de la pequeña al Hospital de La Fe de Valencia, donde sí se cuenta con una UVI pediátrica y una unidad cardíaca infantil pero al que ella, supuestamente, se negó. Un hecho que según el abogado, "no ha podido justificar en su declaración que ha estado plagada de contradicciones".
El traslado que no llegó
"Desde que entramos hasta que falleció mi hija, recibimos una mala atención médica: las enfermeras y los pediatras no sabían actuar y ésta en concreto se negó a hacer el traslado argumentando que mi hija estaba bien", afirma el padre. Según relata, tras insistir, la médico les ofreció el traslado voluntario, y posteriormente una ambulacia no asistida. Al final, "como los padres estaban muy pesados y la estaban agobiando", palabras que el abogado de la familia, José Martín, atribuyó a la pediatra durante su declaración, llamó al SAMU, pero para cuando llegó la pequeña ya había fallecido. La médico implica a facultativos del Hospital de la Fe porque, según su versión, "no facilitó el traslado".
Al salir de los juzgados, la facultavito tuvo que ser escoltada por un guardia civil ante la presiónlos congregados que apoyaban a la familia Moller. Por su parte, el Hospital de Torrevieja no ofreció ninguna información relativa al caso más allá de recalcar "su apoyo a los facultativos que desarrollan su labor en el hospital" con el fin de "no alarmar a la ciudadanía ni crear un juicio paralelo", según indica una fuente. La médico y su letrado no quisieron pronunciarse.
Más de 6.200 firmas para que se investigue
El caso de Lucía no es el único que acusa de supuestas negligencias médicas al Hospital de Torrevieja. Junto a ellos reclaman justicia las familias de los fallecidos Rubén Vinal y Rubén de Almeida, además de otro caso conocido recientemente. Entre todos ya suman más de 6.200 firmas que han sido entregadas al Ministerio del Interior para que se abra "una investigación que aclare qué está pasando en el hospital y a quién se está contratando", afirma Andrés Moller. En su opinión, "si no se hace algo pronto muchos más casos van a salir a la luz". Y es que, según afirma, las negligencias en el caso Moller comenzaron desde el embarazo: "En las ecografías no detectaron una malformación en el corazón ni el estómago desplazado, situación que se podría haber tratado desde el vientre", remarca el padre. M. J. Á.
