El paso de El Calvario, de la cofradía oriolana del Perdón, se concibió originariamente para procesionar a hombros de los devotos y no sobre ruedas, y la Semana Santa de 2012 será la primera ocasión en que los cofrades puedan cumplir con este objetivo. El trono dejó ayer el Museo de Semana Santa, donde se guarda todo el año, se aseguró sobre una grúa y partió rumbo a Málaga, donde el taller de Antonio Cabra obrará la transformación instalándole varales para que los costaleros porten sobre sus hombros la imagen crucificada que en 1942 esculpió Galarza y que sale a las calles cada Martes Santo, hasta ahora sobre ruedas.
El tesorero de la Cofradía del Perdón, José Luis Gil, supervisó ayer el traslado y explicó que el paso no será, con imagen y trono incluidos, demasiado pesado: "El taller donde transformarán el trono nos ha asegurado que cada uno de los 40 o 50 costaleros que lo llevarán soportará de diez a doce kilos, aunque el paso estará habilitado para más cofrades", dijo. La construcción de la plataforma sobre la que se asienta la imagen costará unos 6.000 euros, estará lista en septiembre y se ha concebido con algunas comodidades extra, como que contará con varas o varales "telescópicos", que se podrán plegar y esconder bajo el paso cuando esté expuesto en el Museo de Semana Santa o para maniobrar durante las procesiones al girar calles muy estrechas o esquivar algún obstáculo.
Ligero
Los costaleros se colocarán siempre fuera del trono y no debajo, siguió explicando José Luis Gil. Para reducir el peso del trono, de hecho, también se van a elaborar dos nuevas cruces en material ligero para sustituir a las actuales, que pesan unos 60 kilos cada una. Una vez la plataforma esté acabada, se volverán a colocar a su alrededor las placas plateadas que embellecen actualmente el trono.
La Semana Santa de Orihuela, pese a su importancia a nivel nacional (declarada de Interés Turístico Internacional este mismo año), no se caracteriza por tener muchos pasos portados a hombros. Sí es el caso de Nuestro Padre Jesús Nazareno, Nuestra Señora de la Esperanza de El Lavatorio, la Cruz Penitencial del Ecce Homo, María Santísima del Consuelo y el Santísimo Cristo de Zalamea, además de La Diablesa o el Cristo Yacente que salen en procesión el Sábado Santo.
