La comunidad escolar del colegio público Acequión anunció ayer que tiene previsto realizar una manifestación a las puertas del centro el 3 de junio a las 19.30 horas. El objetivo es llamar la atención a la opinión pública y a la administración por el retraso de las obras de ampliación del centro, que iban a empezar a finales de 2010. El enfado de los padres tiene su origen en ese retraso, pero sobre todo en el hecho de que la Generalitat y el Ayuntamiento obligaran a los alumnos a dejar el centro y trasladarse a uno en barracones -utilizado durante varios años por otro colegio, el Ciudad del Mar- ante "la inminencia de las obras" el pasado mes de septiembre. Los escolares, 320, "se han comido" ya nueve meses de barracones sin que se haya podido aprovechar ese periodo para avanzar en las obras, que cuando se inicien, se prolongarán durante 15 meses, hasta el curso 2012-2013.

Lo cierto es que el proyecto fue ampliamente publicitado en septiembre por el Ayuntamiento como una apuesta por la modernización y ampliación del colegio, que fue inaugurado en 1983, tras años de trámites y problemas con los terrenos, y que incluía un comedor para 200 plazas y la habilitación de un aula más por curso. Pero ni tan siquiera está adjudicado.

El delegado de Educación, José Manuel Pizana, llegó a alegar para justificar el retraso en febrero que se habían presentado 60 ofertas y que el trabajo de análisis y baremación era complejo. Argumento que no ha convencido a los padres puesto que el plazo de presentación de ofertas culminó en agosto de 2010. La remodelación que se plantea por la Conselleria supone una inversión de 5.078.700 de euros y lo que sí tienen claro algunos padres es que la Generalitat no dispone de margen financiero para adjudicar y pagar estas obras.

La comunidad escolar se siente engañada por la administración local y autonómica ante los inconvenientes que supone para unas familias que viven en el barrio del Acequión en pleno casco urbano de la ciudad el traslado diario de sus hijos a un centro situado en Las Torretas.