Dos caballos "maltratados" fueron rescatados y tratados de su heridas después de ser localizados por la Brigada Azul de la Fundación Internacional Para la Protección de Animales Raúl Mérida (FIPARM). Según Virtudes Sanchís, la responsable de la sociedad protectora "Amigo mio", entidad que gestiona el centro de protección animal de Orihuela, los equinos fueron tratados de sus heridas antes de ingresar en las instalaciones oriolanas. Ambos ejemplares estaban heridos y desnutridos cuando los encontraron.

Los caballos, que se llaman "Fortuna" y "Vida" son los dos primeros animales que habitan en el centro de protección animal de Orihuela. Una vez el veterinario certifique que su estado de salud, los caballos serán dados en adopción, señaló Sanchís. Además, el anterior propietario de los equinos podría enfrentarse a una pena de cárcel de seis meses y a una multa de 18.000 euros por "maltratar" a los dos ejemplares, señalaron fuentes de las instalaciones oriolanas.

Sanchís detalló que uno de los caballos "está mejor", mientras que el otro "está más tristón", de modo que deberá permanecer más tiempo bajo los cuidados de los especialistas del centro oriolano. Si tras su curación nadie adopta a los equinos, se quedarán en las instalaciones.

Puertas abiertas

Para dar a conocer el funcionamiento del centro de protección animal, mañana habrá una jornada de puertas abiertas, explicó Sanchís. Las instalaciones se construyeron en virtud del Fondo Estatal de Inversión Local (FEIL) y costaron 1,3 millones de euros. La sociedad protectora "Amigo mio" comenzó a gestionarlas hace unos meses.