El juez del caso Brugal investiga ahora por qué han aparecido en un cajón antiguos escritos de la Fiscalía sobre las investigaciones que no se tramitaron, según confirmaron ayer fuentes cercanas al proceso. Las mismas indicaron que se trataban de documentos puramente formales y que no afectaban al fondo de ninguna de las resoluciones sobre la instrucción judicial. Los escritos están fechados en el año 2008 y ayer fueron notificados a todas las partes.

Las fuentes consultadas por este diario señalaron que la documentación ha sido encontrada días atrás por el personal del juzgado. Se trataba de escritos que el fiscal Anticorrupción había remitido al juzgado instructor del caso Brugal durante el año 2008 haciendo peticiones sobre la marcha del caso. Al parecer, estos escritos que podrían ser unos ocho, jamás se tramitaron ni se hizo nada con ellos. Los documentos se han encontrado ahora olvidados en el interior de un cajón.

El incidente no ha sentado nada bien al titular del juzgado, Carlos San Martín, que ha ordenado la apertura de una investigación para determinar cómo ha sido posible que esto ocurriera. San Martín todavía no se había incorporado al este destino en el año en que están fechados los escritos. Al frente de éste había otra magistrada.

De todos modos, las fuentes consultadas por este diario señalaron que se trata de peticiones sobre aspectos meramente de forma del procedimiento y que no afectan al fondo del asunto. Todas las peticiones del fiscal para prorrogar el secreto del sumario, así como para pedir que siguieran las escuchas telefónicas a los implicados ya fueron estudiadas por los abogados de las defensas en su día cuando buscaban argumentos para pedir la nulidad de la instrucción.

Según las fuentes consultadas por este diario, uno de estos escritos ya apuntaba a la posibilidad de ir haciendo varias piezas separadas independientes de lo que se iba averiguando a raíz de las intervenciones telefónicas del caso Brugal. La medida no se llegó a llevar a efecto en ese momento, ya que no fue hasta el verano pasado cuando finalmente se abrieron las piezas separadas del caso Brugal. Los escritos ahora localizados han sido remitidos a todas las partes para que los estudien y con el aviso de que se ha abierto un expediente para tratar de determinar qué es lo que ha ocurrido. Los abogados no obstante van a analizar esta nueva documentación para ver qué repercusiones jurídicas pueden tener para sus representados.

Por el momento, las defensas están a la espera de que el juzgado resuelva todas las peticiones de nulidad que se pidieron sobre las escuchas telefónicas y los registros, entre otros aspectos. Entre los letrados había llegado ayer el comentario de que estos recursos podrían estar resueltos pasadas las vacaciones de Semana Santa. Cómo se pronuncie el juez sobre estos asuntos es algo que está condicionando la marcha de la instrucción.

No es el primer incidente de este tipo que se registra en el Palacio de Justicia oriolano. En el año 2004, el antiguo juzgado de Primera Instancia e Instrucción número cuatro del municipio se encontró con un armario lleno de causas abandonadas. La investigación que se realizó concluyó que los hechos eran menos graves de lo que parecía en un principio, ya que todos esos asuntos estaban prácticamente acabados a falta de pequeños trámites, según las fuentes consultadas por este diario.

En el juzgado del caso Brugal, el Primera Instancia tres, también se han registrado otros incidentes con la documentación del proceso. De ellas, destaca cuando, al levantar el secreto sumarial, se entregaron a las partes por error folios de la investigación que todavía estaban clasificados como reservados. Entre ellos, estaba la investigación por el Plan General de Alicante. Los letrados tuvieron que devolver la documentación para cambiarla por otra, en la que los folios secretos ya habían sido convenientemente eliminados. También, cuando se remitió a Alicante, la causa sobre las presuntas irregularidades en la Fundación del Hércules, entre los papeles se encontraban más partes del caso del PGOU que se encontraban secretas.