El río Segura a su paso por la Vega Baja viene experimentando desde el domingo un aumento considerable en su caudal que ha llegado a tener, a medio día de ayer, un máximo de siete metros cúbicos por segundo (7.000 litros por segundo). La avenida ha cubierto el canal central de aguas bajas y en su totalidad el cauce en el término municipal de Guardamar muy cerca de su desembocadura. La riada, la primera de otoño, ha ocasionado el arrastre hacia el mar de numerosas bardomeras de cañas y residuos flotantes.