El pleno de ayer fue uno de los más agitados de esta legislatura. A los cinco minutos del inicio, el concejal de Los Verdes Manuel Gallud empezó a caldear el ambiente por no estar de acuerdo con las actas de las sesiones anteriores. Y es que los astros parecieron alinearse para que la crispación reinase en el salón de Plenos. Por un lado, un aparato de aire acondicionado averiado que elevó la temperatura de la sala a niveles poco aptos. Por otro, decenas de vecinos airados porque no tienen por dónde cruzar la N-332. Y, por si era poco, una investigación (la del caso "Brugal") que sobrevoló las intervenciones de los concejales; sobre todo de la oposición, para intentar poner contra las cuerdas al grupo popular.

La aprobación por unanimidad de la adopción del Código del Buen Gobierno Local, elaborado por la Federación Española de Municipios y Provincias (FEMP), no sirvió para que el PP aceptase un par de mociones que tenía que ver con preceptos de esta guía.

El equipo de Gobierno se opuso a la destitución temporal de Ginés Sánchez, Antonio Rodríguez Murcia y Manuel Abadía sugerida por Los Verdes. Estos ediles fueron detenidos y puestos en libertad con cargos el 6 de julio, al tiempo que la Policía Judicial registraba el Ayuntamiento en busca de documentación relacionada con la contrata del servicio de recogida de basuras de Orihuela. De este modo, el portavoz ecologista, Monserrate Guillén, solicitó que se apartase a estos tres ediles de sus competencias hasta que se aclarase su imputación. El portavoz adjunto del PP, David Costa, reprochó a Guillén que no respetase la "presunción de inocencia" reconocida en la legislación española y le acusó de "tapar su inoperancia política" e intentar "sacar votos" haciendo leña del árbol caído.

La portavoz del grupo socialista, Antonia Moreno, recordó que Costa asistió a la convención del PP en Sevilla en la que esta formación aprobó el pacto por la transparencia y contra la corrupción. Este documento insta, según la concejala del PSOE, a retirar las competencias a aquellos cargos electos que estén en libertad con cargos.

Y fue Moreno quien protagonizó la sorpresa del día con una moción registrada a primera hora de ayer en la que pedía por enésima vez que se le dejase acceder a unas facturas emitidas por once empresas al Ayuntamiento. La portavoz socialista detalló que entre esa documentación figuran facturas por valor de un millón de euros pagadas con reparos de intervención a una empresa cuyos administradores son Javier Bru (concejal de Albatera imputado en el caso "Brugal") y el hermano de la alcaldesa. Las respuesta del concejal de Hacienda, Antonio Lidón, empezó a gritos para acabar aconsejando que "pida la información como tiene que pedirla y se le concederá". Aún así, Moreno no se lo creyó del todo y en un ruego solicitó a la alcaldesa que instase a Lidón a que le diese las facturas. Lorente aprovechó para recomendar a la portavoz socialista "que no se monte películas" a lo "Perry Mason" y que "trabaje como debe".