Aunque la ceremonia religiosa se suele celebrar en la iglesia de las santas, la conjunción de acontecimientos de este especial 2010 provocaron el cambio de ubicación de la misa. Por un lado, el quinto centenario de la Catedral y, por el otro, que el templo de dedicado a las Santas Justa y Rufina, patronas de las fiestas de la Reconquista, está en obras de rehabilitación.
Así, las imágenes fueron trasladadas desde la seo, no sin antes pasear por las calles más céntricas de Orihuela al ritmo de las marchas propias de los festejos oriolanos. Aún así, la solemnidad y la seriedad marcó el paso del pasacalles de ayer en consonancia con el respeto que la familia festera siente por las patronas de la Fiesta.
Los cargos festeros presidieron el traslado, así como diversas autoridades civiles de Orihuela. Con el traslado de ayer, los actos institucionales y religiosos se dan por finalizados para dejar paso al rosario de desfiles de Moros y Cristianos que tendrán lugar los próximos días.
Representación
De este modo, la guerrilla de pólvora ensordecerá esta noche a la ciudad que, posteriormente, asistirá a la representación de la toma del castillo.
Las explosiones de los trabucos pondrán el acento en la tradición compartida por toda la Comunidad Valenciana en torno a la pólvora. No obstante, las medidas de seguridad se extremarán durante esta noche para que no ocurra ningún accidente que pueda enturbiar las fiestas de Moros y Cristianos.
La representación de la toma del castillo, cuyo guión fue escrito por el dramaturgo oriolano Atanasio Díe, se desarrollará en la glorieta Gabriel Miró, donde el alcaide del castillo, cargo que este año ostenta José Antonio Juan, quien pronunciará su tradicional discurso en uno de los momentos más emotivos de este acto festero tan oriolano.
Niños
Los más pequeños deberán esperar hasta mañana para formar las filás que compondrán el desfile infantil.
Este acto, protagonizado únicamente por niños, ha sido uno de los más valorados a la hora de conceder a las fiestas la declaración de interés turístico comunitario, puesto que en pocos municipios cuentan con actividades específicas como la de mañana.
