Los sindicatos CC OO, CSIF y SEPCV han alertado en un comunicado de la existencia de "irregularidades en masa" en la instrucción de un expediente disciplinario por falta grave abierto contra un policía local y denuncian que ese procedimiento se enmarca en la política "del miedo como norma o como rasero moral" impuesto desde la Jefatura de la Policía Local de Torrevieja desde hace años. Los tres sindicatos muestran su respaldo al agente que "no tiene mancha alguna en su expediente laboral ni judicial" y reclaman que sea sobreseído cuanto antes.
El procedimiento abierto contra el agente se centra en su negativa a atender un servicio solicitado por un mando. Como ya publicó el periódico, el agente entendió que la orden excedía sus competencias al estar vinculado a la investigación del ahogamiento de una mujer en la piscina de un hotel, una decisión que refrendó por escrito la juez decana de Torrevieja.
Desobediencia
Sin embargo, el mando que vio desautorizada su orden abrió un procedimiento por desobediencia que siguió adelante. La petición en el juzgado para que se archivara el expediente fue rechazada por la Audiencia. El compañero de este agente en el mismo servicio también rechazó realizarlo, aunque su expediente se ha archivado porque ya trabaja en otro municipio.
Los sindicatos aseguran que han mantenido contactos sobre este asunto para ser asesorados con jueces, abogados, ingenieros, personal experto en Derecho Administrativo, mandos y agentes y "todos, absolutamente todos, se quedan sorprendidos de la desfachatez irrisoria" de los ejecutores del expediente que "han equivocado términos, conceptos básicos, plazos, que han ido contra el órgano judicial y que no han buscado comparar versiones" y han presupuesto culpable desde el principio al "policía que tuvo una actuación digna y coherente".
Para estos sindicatos los actuales mandos de la Policía Local (el director general Javier Mínguez y el intendente principal Vicente Gutiérrez) "tienen terror al régimen de antaño" y de realizar una "superación del pasado selectiva" donde se "denigra y castiga al frágil", aseguran.
