El grupo de expertos en organizaciones latinas como los Latin King, pero también como los Ñetas, conocen en profundidad la simbología, los protocolos o las normas de las bandas. Aprenden sobre ellos "hablando con gente en la calle y a través de los arrepentidos", que al parecer son bastantes, según explicó ayer a este diario un portavoz de la Policía.
Las bandas tienen claramente una organización jerarquizada y cada uno porta objetos que identifican su puesto en la cadena de mando, sobre todo collares de cuentas que se diferencian por los colores y los tamaños. Como explicó un agente, el máximo rango es el de los "incas", que llevan collares de cuentas rojas y negras y una piedra negra más grande en el centro que se conoce como "la pepa". Ellos son los que "mandan", los encargados "de los cobros o de "los minutos"", y hay sólo uno por agrupación.
Según la información de que dispone la Policía, "para acceder a la banda hay varias pruebas. "El minuto, la pared o dar amor" consiste en que se apoya un pie en la pared y durante un minuto otro te da una paliza. Eso es "dar amor"".
Los siguientes llevan collares de cuentas negras y doradas con un crucifijo. Son los "reyes" y las "reinas", inferiores al "inca", pero el escalón superior a los "probatoria" (cuentas negras y doradas) y los "observación" (mismos collares, pero más finos y con las cuentas más pequeñas).
Promociones
Se promociona en su jerarquía cometiendo robos violentos, vendiendo droga y hasta siendo detenido por la Policía, contaron ayer los expertos. Por eso no esconden sus colores y sus signos distintivos, sino que alardean de ellos.
