La junta de gobierno municipal tardó siete minutos en liquidar la disputada adjudicación del contrato de limpieza de dependencias municipales a favor de la empresa La Generala. Una adjudicación cuyo primer procedimiento de adjudicación se remonta a 2006. En este caso hubo anuncio municipal para difundir la resolución de uno de las adjudicaciones más importantes del mandato y que supondrá un desembolso de las arcas municipales de un millón de euros para realizar el mantenimiento y limpieza de 70 dependencias municipales repartidas por todo el término municipal. El concejal Manuel Abadía, miembro de la junta de gobierno, se ausentó de la reunión al compartir intereses empresariales con La Generala. El ex alcalde José Manuel Medina antes de su marcha dejó el contrato con una propuesta de resolución a favor una empresa valenciana. El nuevo equipo de gobierno decidió bloquear ese proceso e iniciar otro que se remonta a diciembre de 2008 y que había pasado por junta de gobierno en dos ocasiones. La valoración a favor de La Generala suscitaba algunas dudas entre los miembros del equipo de gobierno del PP. Colsur, del empresario Ángel Fenoll, y en menor medida, Limpiezas Ripoll realizan esos trabajos hasta la fecha sin contrato y facturando los trabajos de forma mensual.