El resultado para cubrir diez plazas en propiedad de la plantilla de la Policía Local va a obligar al despido de sus diez agentes interinos, algunos con casi diez años de experiencia. Los policías que ocupaban esas plazas llevaron al juzgado los criterios de la oposición y la paralizaron en dos ocasiones y denunciaron públicamente que se trataba de una "limpieza" ordenada por varios mandos. Sus plazas fueron seleccionadas porque el intendente, en aquel momento jefe máximo de la Policía Local, los eligió, les dijo, bajo el pretexto de "ser los mejores", sin tener en cuenta la jurisprudencia que legitima la antigüedad "como razón objetiva" para cubrir las plazas interinas por otras en propiedad.

Todos los grupos de la oposición, la junta de personal del Ayuntamiento, los sindicatos mayoritarios y la mitad de la plantilla denunciaron esta situación y rubricaron un documento en apoyo de estos interinos. Ahora ninguno de "los elegidos como los mejores" ha superado la oposición. Todos perderán sus puestos de trabajo. Los agentes tienen números de identificación tan dispares como I-19, I-24, I-25, I-47, I-48, I-79, I-55 e I-101. Uno de ellos ha sufrido una grave enfermedad psicológica derivada de este proceso que lo incapacita para trabajar.

En los próximos días se publicará la lista de aprobados definitivos, que tendrán que acudirán al Instituto Valenciano de Seguridad Pública y después estarán en prácticas dos meses en Torrevieja. Ni los relevos en la cúpula ni el cambio de imagen en la Policía han podido bloquear el proceso.