Indignados con el claustro de profesores están los padres de D. A. R., de ocho años y alumno del Colegio Público de integración La Paz, de Callosa de Segura. Su hijo, alumno de segundo de Primaria, padece una discapacidad física del 70% que le convierte en "dependiente total" para desplazarse por el centro, para ir al baño o para comerse el almuerzo, y desde el jueves está "invitado" por el director y por los docentes a quedarse en su casa, sin ir a clase, porque la educadora que le ayuda a moverse está de baja. Así lo explican al menos sus padres, que comparten preocupación con otras dos familias de niños con problemas motores y en la misma situación, aunque María José Ruiz aclara que no es portavoz del grupo.

Según relata, la educadora está de baja desde el lunes, y en la reunión del jueves del Consejo Escolar (del que es vocal el padre del menor) "el director del colegio anunció que el claustro de profesores había votado que mientras no se personara la educadora, que no fueran al colegio". Para los padres "es muy grave, porque la ley nos obliga a llevar a nuestro hijo al colegio, no me pueden pedir que no lo haga", resumió su madre, quien tampoco descarta acciones legales porque "están queriendo privar a nuestros hijos de sus derechos: Este es el primer paso (la protesta ante Inspección y acudir a los medios), si tengo que poner una denuncia o montar una manifestación lo haré".

Según cuenta, el director del centro reaccionó al enfado de algunos miembros de la Asociación de Madres y Padres de Alumnos (AMPA) diciendo que "nos acompañaría el lunes a Inspección Educativa para ver si lo solucionamos, pero ayer (por el viernes) se arrepintió y dijo que las mamás somos las únicas que podemos hacer fuerza. Nos pidió comprensión, apoyo, paciencia... Llevo cuatro años yendo al colegio a darle el almuerzo a mi hijo y yéndome a las excursiones porque no le ponen a alguien que le acompañe, en un colegio que supuestamente es de integración", se quejó María José Ruiz.

La educadora que actualmente está de baja ayuda a los niños con problemas motores "en las entradas y salidas, desplazamientos de ocio, clases de educación Física, actividades lúdicas, cuestiones como comer e ir al servicio...", resumían estos padres. En un centro de integración, según aseguró la madre, ante la falta de personal son los profesores quienes deberían asumir estas funciones.

"Les molestan estos niños"

"La impresión que tenemos como padres tras casi cinco años de escolaridad es que les molestan estos niños, les molesta tener que llevarlos al aseo o darles el almuerzo en vez de estar tomando un café en la sala de profesores", resumió con enfado María José Ruiz. "Mi hijo es tímido y el otro día estuvo de las 9 de la mañana a las 12.30 sin ir al baño porque nadie se dignó a llevarle al baño".

Pese a su discapacidad, D. A. R. puede comer solo porque puede manejar algunas cosas con las manos, "pero tienen que abrirle la bolsa y pincharle el zumo, y si lo has sentado en un banco hay que estar pendiente de que no se caiga... Es muy serio lo que está ocurriendo, nos da igual que el director pida disculpas, es que el claustro, que es la suma de los profesores, ha estado de acuerdo en que estos niños molestan, en que su obligación es ejercer la docencia pero no llevarlos al baño... ¿La humanidad dónde la tenemos? Apelamos a eso, él necesita estar integrado porque la cabecita la tiene muy bien amueblada y avanza cada día", concluía su madre.