La Plaza de la Constitución de Almoradí era ayer un hervidero de visitantes y vecinos, ávidos por encontrar las mejores gangas de entre el montón de ofertas que habían sacado a la calle los comerciantes locales. Una docena de puestos ofrecían calzado, moda, complementos, telefonía, mobiliario para bebés o colchones, y el intercambio de monedas y billetes entre los clientes y los dependientes era constante.

Aunque aún no se han recontado las ventas, porque hoy también estará abierta de diez de la mañana a nueve de la noche, la Feria Outlet ha desembarcado en Almoradí con fuerza. De hecho, viene a completar la oferta del mercado de los sábados, que corta decenas de calles en pleno centro del municipio y que se caracteriza por ser uno de los más concurridos de la comarca.

La Concejalía de Comercio de Miguel Gascón y la Agrupación de Comerciantes, que preside Juan Gómiz, elaboraron un programa de actividades paralelas a la feria para atraer más visitantes. Si ayer se celebró una degustación de paellas tradicionales o actuó el grupo musical "La Furgo", hoy a las 12 horas tendrá lugar un taller de artes plásticas para niños, una degustación de tapas típicas almoradidenses a las 13, o una actuación de jazz a las 20 horas, justo una hora antes de la clausura.

Entre trajes de señora y chaquetas a 20 euros, zapatos a 15 o botas de piel a 50 euros, también lanzaba sus ofertas la parafarmacia. Gente de todas las edades se decidió a comprobar la talla tras un biombo o a probarse los primeros zapatos de verano. Para los comerciantes que instalaron sus 14 tiendas temporalmente en la calle, esta feria "muestra lo que es el comercio de Almoradí, la posibilidad de encontrar productos de primera calidad a precios muy bajos sin perder calidad".