La ermita del Santo Sepulcro acogerá la sede del Centro de Estudios de la Evolución Urbana de Orihuela tras llevarse a término la rehabilitación que se está abordando en estos momentos. El objetivo es que este edificio se convierta una vez remodeladas sus instalaciones en un foco de atracción turística y cultural para el barrio de San Isidro, según anunció ayer la alcaldesa, Mónica Lorente, en una nueva visita.

Aunque las obras comenzaron oficialmente a finales de mayo de 2009 y contaban con un plazo de ejecución de seis meses, éste ha debido ser prorrogado hasta el 30 de junio ante la dificultad de los trabajos.

La inversión es de medio millón de euros y está sufragada por los fondos estatales de inversión local, el denominado Plan E del Gobierno central. Lorente explicó ayer el tipo de actuación que se está desarrollando en este antiguo edificio. Adelantó además que en el centro de próxima apertura se prevé la realización de exposiciones y muestras de carácter temporal donde se vaya describiendo la evolución urbana de la ciudad de Orihuela. Una evolución en el tiempo que se contará a través de la actividad realizada tanto por el Concejo de la ciudad como por las órdenes religiosas que han configurado la historia urbana de Orihuela a través de los siglos. Para ello las instalaciones contarán con dos salas de exposiciones y una sala de proyección entre otras dependencias que se habilitarán para uso público de carácter cultural.

Construida en la primera mitad del siglo XVIII la ermita del Santo Sepulcro vinculada al Convento de los Padres Franciscanos, del que está muy cerca, destacaba por el ruinoso estado en el que se encontraba antes de ser acometidas las actuales obras de restauración. Su tipología arquitectónica es bastante singular ya que se trata de un edificio aislado dependiente de un complejo religioso mayor.

Caballeros del Rey Fernando

En el año 1976 la ermita se vende a la Comparsa de los Caballeros del Rey Fernando, que la hizo suya como sede festera, aunque al no recibir el mantenimiento necesario en un edificio de esas características, de elevado coste, "es abandonado" según recoge la memoria del proyecto.

Es en el año 2007 cuando el Ayuntamiento lo adquiere para proceder a una restauración que, tras permanecer en lista de espera, ahora está siendo sufragada con los Fondos Estatales de Inversión Local.

La adjudicación del proyecto llegó tras el último y más grave desplome de la bóveda del edificio, que obligó a cortar las calles adyacentes de esta barriada popular en abril de 2009. La intervención viene forzada además porque el inmueble está catalogado dentro del Plan General de Ordenación Urbana de Orihuela con primer grado de protección.