La juez de guardia ordenó ayer el ingreso en prisión del conductor de 26 años de edad y residente en una urbanización de Rojales, que se vio involucrado en un "pique" entre conductores el pasado lunes y que acabó en una reyerta con navajas. A consecuencia de esta pelea falleció el otro conductor implicado, de 38 años.
El detenido fue trasladado ayer a la prisión de Foncalent tras prestar declaración por estos hechos ante la juez titular del juzgado de Instrucción 2 de Torrevieja. El fiscal solicitó el ingreso en la cárcel tras asistir a la declaración del detenido (que el jueves fue dado de alta en el Hospital de Torrevieja, pues sufrió la perforación de un pulmón durante la pelea). Las diligencias contra él están abiertas por un delito de homicidio. El ingreso en prisión se ordenó comunicado y sin fianza, según ha podido saber este periódico. En su declaración éste manifestó que actuó en defensa propia.
Alta
El supuesto homicida fue detenido tras recibir el alta. La Guardia Civil, que lo ha custodiado durante su convalecencia en el Hospital de Torrevieja, procedió con urgencia al cierre de las diligencias porque las 72 horas de detención habían tenido que ser prorrogadas por su convalecencia, tomándole declaración y poniéndolo a disposición judicial. El detenido llegó ayer a los juzgados a primera hora de la mañana y en él se veían con claridad las heridas que había sufrido, principalmente una que le alcanzó el rostro y que puso en riesgo su vida.
El enfrentamiento entre los dos implicados sucedió a las 20 horas. Ambos conductores se vieron envueltos en un "pique" y la posterior persecución que acabó en una rotonda de acceso a la urbanización Ciudad Quesada, de Rojales. Según el testimonio de los testigos, ambos se apearon de sus vehículos y, al parecer, uno de ellos (el fallecido) sacó una navaja, con la cual asestó varios cortes y puñaladas al otro en la cara, el torso y el tórax. Por causas que se desconocen, el arma se quedó clavada en el cuerpo del oponente. Éste aprovechó esa circunstancia, a pesar de sus heridas, para cogerla, repeler la agresión y defenderse. Uno de los ataques fue al cráneo y costó la vida horas más tarde a su rival. El fallecido era natural de Madrid aunque residente en Torrevieja. Su familia está destrozada por lo ocurrido.
