Treinta millones de euros. Eso es lo que costará canalizar los barrancos de la Sierra de Orihuela para evitar los efectos de las aguas torrenciales en las calles y casas del casco urbano, entre la cuesta del Seminario de San Miguel y el barrio de San Isidro. Así lo anunció ayer Manuel Abadía, concejal de Infraestructuras, quien aseguró que la financiación correrá exclusivamente de la Confederación Hidrográfica del Segura (CHS). Como avanzó esta edición el 27 de octubre, la CHS ha adjudicado a la empresa "M&K Ingeniería Civil", por casi 120.000 euros un anteproyecto de actuaciones para reducir la velocidad de las escorrentías y volumen de arrastre de materiales con presas de laminación en los barrancos y canalizar todas esas aguas procedentes de la Sierra de Orihuela.

Ese agua se redirigirá a un depósito con capacidad para 55.000 metros cúbicos ubicado probablemente en un meandro del Segura, aguas arribas del casco urbano. Ese depósito podrá inyectar esos aportes poco a poco al caudal del Segura para mejorar la calidad de las aguas.

Fue el Ayuntamiento el que se dirigió al organismo de cuenca para solicitarle una actuación en este sentido ante las graves consecuencias materiales que en los últimos años han tenido las lluvias en algunas zonas del barrio de San Isidro, calle Barranco o Pocico de Santiago, como en septiembre pasado o en junio de 2008. Aunque en un principio se habló de un presupuesto de 20 millones de euros, con una financiación compartida entre el Ayuntamiento y la CHS, Abadía lo elevó ayer a 30 millones y dijo que el coste lo asumiría al completo la Confederación.

Por otro lado, parte del muro que delimita el aparcamiento del Seminario sigue sin ser reparado desde que el efecto de las lluvias lo destruyó el 10 de junio de 2008, como pudo comprobar el propio edil, quien justificó el retraso en que se trata de una competencia de la Diputación de Alicante.