La escritora María Dueñas participó en una jornada sobre la diáspora de los españoles a EE UU entre 1868 y 1945 celebrada en la Universidad de Alicante (UA). Dueñas, que centra su última novela en este hecho histórico, quiso acompañar al catedrático de la Universidad de Nueva York James Fernández y a la profesora de la UA Teresa Morell, que han publicado investigaciones sobre este tema y la han ayudado a ambientar su obra.

Su próxima novela, Las hijas del capitán

Todavía poco porque aún no está en las librerías, pero sí puedo contar que es una novela que rinde un homenaje a la emigración española en general y a una en concreto muy desconocida. Tendemos a pensar que casi todos los que emigraron en la primera mitad del siglo XX fueron a Latinoamérica o fueron exiliados y hay un capítulo que tenemos olvidado que es el de la emigración pura y dura por necesidad, para huir de la falta de oportunidades, a Estados Unidos. Fue una emigración interesantísima porque fue muy transversal tanto en los orígenes como en los destinos. Hubo muchos inmigrantes gallegos, asturianos y vascos pero del resto de España también, como la provincia de Alicante y en concreto la Marina Alta, que contribuyeron enormemente a enviar primero hombres y después familias enteras y sus historias son épicas. Mi libro rinde un homenaje a toda esa colonia aunque dentro de ella yo construyo una ficción que ya es pura imaginación.

¿Por qué decidió ambientarla en Nueva York tras el paso por California en su obra Misión Olvido? ¿Porque era la puerta de entrada?

Supe a través de las investigaciones del catedrático de la Universidad de Nueva York James Fernández y de la profesora de la Universidad de Alicante Teresa Morell que hubo una colonia bastante numerosa en Nueva York. Es verdad que quedó soterrada porque había otras comunidades de otros países muy potentes como la italiana y la irlandesa. En comparación los españoles eran muy poquitos pero tuvieron su importancia, sus barrios, sus instituciones, sus propios establecimientos en los que vendían desde boinas hasta botijos y alpargatas. Creo que valía la pena reivindicar ese legado.

Es una parte muy olvidada de la historia, ¿de dónde surgió el interés por centrarse en ella?

Fue a partir de la documentación. Como he sido profesora muchos años todavía llevo dentro parte de la investigadora que fui. Antes de arrancar con una novela normalmente busco mucha información, me documento. Yo quería escribir una novela sobre mujeres emigrantes pero no tenía claro ni de dónde procedían ni a dónde llegaban, así que empecé a documentarme y buscar información y me encontré con trabajos muy interesantes. Nueva York es tan apasionante que en cuanto tuve constancia de que esa colonia fue lo suficientemente nutrida y significativa como para tener una importancia real me lancé a la aventura.

Incluso creo que hay algún personaje alicantino.

Sí, porque la presencia alicantina era bastante numerosa y a mí me gusta, como ya hice en El tiempo entre costuras y Misión Olvido, arrancar algún personaje de la realidad, dotarlo de vida y hacer que se mezcle con mis personajes de ficción. Así que sí, hay algún alicantino en la novela y también referencias al Círculo Valenciano y al hotel La Valenciana. Esta zona está bien representada.

¿Nota más presión a la hora de escribir una nueva historia tras los éxitos anteriores?

No, porque cada novela es una ilusión nueva, para mí son todas igual de ilusionantes. En el fondo te enfrentas a lo mismo, a los lectores hay que ganarlos libro a libro, no puedes dar por hecho que cualquier cosa sirve y los vas a convencer. Los lectores son fantásticos porque están ahí siempre esperando pero también tienen un nivel de exigencia que hay que tener en cuenta.

En todas sus novelas siempre hay personajes de mujeres valientes que tras un revés salen adelante, ¿cómo ve el movimiento surgido el 8M?

Me parece muy bien, cómo no. Es bueno que se dé visibilidad a los problemas que las mujeres como colectivo hemos tenido a lo largo de la historia. Está bien que se mueva la cosa, que se alcen las voces y se vaya teniendo esa visibilidad.