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Medio ambiente

Denuncian la muerte de varios patos en los estanques de la Universidad de Alicante

La causa de los fallecimientos se desconoce pero no se descarta que se deba a comportamientos agresivos entre las propias aves

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Denuncian la muerte de varios patos en los estanques de la Universidad de Alicante

Estudiantes de la Universidad de Alicante (UA) han denunciado este fin de semana a través de las redes sociales la muerte de varios patos en los estanques del campus, todos ellos crías aunque no de muy corta edad. Los animales estaban en las fuentes del área comprendida entre el Aulario II, la Biblioteca General y el Paraninfo, donde la colonia de ánades es bastante numerosa. El caso ha sido notificado al Servicio de Protección de la Naturaleza (Seprona) de la Guardia Civil, según ha indicado Ara Tena, una de las alumnas de la UA que comenzó a difundir lo ocurrido en la tarde del domingo.

En las imágenes se observan cinco patos muertos (cuatro en un estanque y un quinto en otro), y algo de basura en una de las fuentes. La población de ánades en las zonas húmedas del campus ha proliferado de manera enorme en los últimos meses, hasta el punto de haberse convertido en habitual la imagen de una pata acompañada de sus crías en el césped o en el agua. Al margen de esta superpoblación, al principio se especulaba con que el intenso calor que ha hecho en los últimos días -y que era todavía mayor este lunes- y la escasez de agua en los estanques podía estar tras el fallecimiento de los animales. No obstante, desde la institución han apuntado más a que el motivo de las muertes haya sido un comportamiento agresivo entre los propios animales, sin descartar tampoco la hipótesis de un acto vandálico.

El vicerrector de Campus de la UA, Rafael Muñoz, ha defendido que "los estanques de la Universidad están limpios", y que aparte de que el agua se va regenerando continuamente, "cada cierto tiempo se vacían y se limpian", pero siempre "de manera paulatina" y nunca deja de haber agua. Por ello, considera que lo sucedido ha podido deberse al calor, a falta de conocer más datos. En las imágenes difundidas en las redes se observan algunos residuos en una de las fuentes, pero la propia estudiante que las tomó admite que la suciedad podía deberse al hecho de que era fin de semana y que las papeleras cercanas podían haber rebosado y caer algunos desperdicios al agua.

Una pata con dos crías, este lunes en el campus de la Universidad de Alicante. Foto: Jose Navarro

Fuentes cercanas al servicio de Jardinería de la UA han señalado, por su parte, que un posible episodio de agresividad entre los propios patos era una hipótesis a tener muy en cuenta, dados los comportamientos habituales de esta especie. En este sentido, han explicado que, en épocas de celo, es frecuente que los machos adultos se ataquen entre sí o a ejemplares más pequeños como acción de dominio para tratar de montar a las hembras, o que las patas ataquen a las crías de otra hembra por una cuestión territorial. Al respecto, han comentado que algunos estudiantes han señalado en los últimos días que se había visto alguna escena así.

Las mismas fuentes consideran poco plausible la posibilidad de que la muerte de los patitos se haya debido al calor o a la falta de agua, puesto que hay muchos ejemplares más pequeños que los fallecidos que no han sufrido ningún daño ni en los que se ha observado anomalía alguna. Respecto al estado del agua de los estanques, han indicado que en épocas de cría no se emplea cloro en la limpieza, precisamente para no perjudicar a los patos. Además, han recordado que el hábitat natural de la especie son precisamente aguas que, sin llegar a estar contaminadas, no están completamente limpias. Tampoco se descarta un acto vandálico, dado que uno de los comederos de los patos estaba roto.

Varias aves lanzándose a uno de los estanques cercanos a la Biblioteca General. Foto: Jose Navarro

El calor, en todo caso, ha sido en los últimos días muy intenso, y eso se reflejaba este lunes en la colonia de patos de esta zona del campus, con los animales cobijados bajo la sombra o tirándose en bandadas al agua. El domingo se alcanzó una temperatura máxima de 29,1 grados en el entorno de la UA, según los datos de la estación meteorológica existente en el campus, el mismo valor que se ha alcanzado en la mañana del lunes. Además de al Seprona, la estudiante Ara Tena se ha dirigido al Vicerrectorado de Campus para poner una queja e instar a que se aclare cuál ha podido ser la causa de la muerte de los patos.

Muy queridos por los estudiantes

Hasta hace pocas fechas, la colonia de patos del campus de la UA se circunscribía al entorno del Bosque Ilustrado, pero en los últimos años la población ha aumentado de manera muy significativa y ahora se dejan ver casi en cualquier estanque del recinto universitario. Su presencia lleva camino de convertirse en una estampa clásica del entorno y no son pocos quienes les hacen fotos (lo mismo estudiantes que profesores que personal administrativo y de servicio) para compartirlas en las redes sociales, compartiendo popularidad con los célebres gatos que constituyen otra imagen característica de la Universidad de Alicante.

Patos acudiendo en bandada a ser alimentados por dos estudiantes de la Universidad. Foto: Jose Navarro

Aunque los patos disponen de grandes comederos donde pueden alimentarse fácilmente, puestos por los mismos encargados de mantenimiento de la Universidad, muchos estudiantes les dan también el pan que les sobra de sus bocadillos o sus menús. Este lunes a mediodía, quizá como cualquier otra jornada, la imagen era más que llamativa. Dos de estas personas que dan habitualmente de comer a los patos son Andrea Piscedda y Daniel Koch, quienes bromean con que los ánades "son nuestros compañeros de estudio". Al conocer la muerte de al menos cinco animales este fin de semana se lamentaban de que "hace calor, hay muy poca agua y seguramente no estará muy fresca".

También Sara Reig y Marta Alonso consideraban que "los estanques deben ser ahora como una cazuela, por la temperatura del agua", y hacían hincapié en que "nunca esto había estado tan lleno de patos". A su juicio, podría tomarse en consideración algún control de la población para evitar que crezca de forma desmesurada. Por el momento, ellas se limitaban a darles también de comer, hasta el punto de ser prácticamente rodeadas por las aves. La imagen es habitual, tal y como corroboraban otros estudiantes, para quienes el problema no está tanto en la limpieza de los estanques como en "la basura que la gente deja tirada y que el viento arrastra hasta el agua".

Patos de distintas edades esperando recibir alimento de una estudiante, al lado de un estanque. Foto: Jose Navarro

Por su parte, Javier Segovia también estima que "el agua debería estar más limpia, por los propios patos", y que a lo mejor ha sido aventurado "dejarlos criar tanto" hasta convertirlos en una estampa habitual. Eso sí, remarca, una estampa simpática, "un elemento más de la fauna universitaria, como los gatos". Aunque los felinos, recuerda, "son más independientes".

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