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Una de cada seis personas mayores de 65 años padece baja visión

Una de cada seis personas mayores de 65 años padece baja visión

«Hace años que no puedo leer», «ya me da miedo salir a la calle solo», o «no puedo ver la comida que me voy a echar a la boca», son frases que escuchamos a menudo en nuestras consultas oftalmológicas en boca de pacientes con baja visión. Según Begoña Martín Reolid, especialista en optometría de Oftálica, «la baja visión es una pérdida de la visión que hace que las tareas diarias sean difíciles de realizar. Una persona con baja visión puede encontrar difícil realizar ciertas actividades como la lectura, la escritura, ir de compras, ver televisión, ver el número del autobús, conducir un automóvil, o reconocer caras».

Enfermedades oculares como degeneración macular asociada a la edad, retinosis pigmentaria o retinopatía diabética, entre otras, afectan a un alto porcentaje de nuestros mayores, y tienen como consecuencia una disminución de su agudeza visual o una reducción de su campo de visión. El alcance, la mayoría de las veces, es la pérdida de su autonomía e independencia a la hora de realizar tareas de su vida cotidiana, que anteriormente hacían sin ninguna dificultad.

Para ayudar a diagnosticar una baja visión, el examen ocular completo por lo general comienza con preguntas sobre su historial médico y cualquier problema de visión que el paciente pueda estar experimentando. También requiere una serie de pruebas diseñadas para evaluar la visión y exámenes de enfermedades de los ojos.

El doctor Enrique Chipont, director médico de Oftálica explica que, «con el objetivo de mejorar la vida de las personas con este tipo de problemas oculares, la unidad de Baja Visión de Oftálica se ha especializado en el diagnóstico y técnicas para conseguir, con una correcta adaptación y una labor de rehabilitación visual, el máximo rendimiento del resto visual útil de estos pacientes, y de esta forma conseguir que puedan volver a realizar esas tareas que se les resistían, y así hacer más fácil su día a día».

Según Begoña Martín, «una vez agotados los métodos médicos y quirúrgicos, existe la posibilidad de mejorar la calidad de vida de estos pacientes, utilizando ayudas de baja visión. Se trata de sistemas ópticos como telescopios, microscopios, lupas, filtros o sistemas electrónicos».

Ayudas para mejorar la baja visión

Hay numerosos consejos prácticos y dispositivos para ayudarle a seguir siendo independiente con una baja visión, utilizar métodos de aumento, reorganizar su casa o lugar de trabajo, usar libros y dispositivos de audio, entre otros.

1. Más luz:

- Mejorar la iluminación. Utilice una lámpara de luz blanca y fría de cuello de cisne dirigida hacia la actividad que esté realizando.

- Reducir el deslumbramiento. En espacios interiores, cubra las mesas de madera y mostradores brillantes; use filtros de absorción selectiva o gafas de recubrimiento lateral. Al aire libre, pruebe el uso de filtros de absorción selectiva. El uso de viseras puede ser útil en espacios interiores o al aire libre.

- Aumentar el contraste. Utilice rotuladores en lugar de bolígrafos. Trace una línea oscura donde tenga que firmar. Use una taza blanca para el café, por ejemplo.

2. Aumentar el tamaño:

- Agrandar. Consiga naipes con material impreso grande, al igual que tarjetas de bingo, crucigramas, marcadores de teléfono, mandos a distancia para TV, calendarios, teclados y libros.

- Acercar. Siéntese cerca del televisor, y en la parte delantera de un auditorio en presentaciones (en un teatro, por ejemplo).

- Ampliar. Existen distintas lupas y sistemas electrónicos de aumento, apropiadas para diferentes personas y diferentes tareas.

3. Organizar:

Asigne lugares para las cosas en su refrigerador, sus llaves y su billetera. Minimice el desorden. Separe la ropa azul de la negra.

4. Marcar las cosas de forma clara

Marque los termostatos y diales con rotuladores de punta gruesa, las etiquetas de sus medicamentos con marcadores o bandas adhesivas de colores, y ponga etiquetas a la ropa de colores.

5. Los oídos son buenos sustitutos para los ojos

Consiga libros y revistas de audio. También existen relojes, calculadoras, glucómetros, tensiómetros y ordenadores con audio.

6. Ser participativo

No se aísle. Mantenga un grupo social, un trabajo voluntario, pida ayuda si la necesita.

7. Conducción del automóvil

Si usted puede conducir, escoja sus rutas y tiempos de conducción cuidadosamente. Considere la posibilidad de usar gafas con filtros de absorción selectiva para evitar deslumbramiento. Pero esté preparado y considere si la conducción del automóvil es una buena idea. Otra alternativa es compartir el vehículo o utilizar el transporte público.

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