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Un microrrelato

Los contenedores hambrientos

En el pueblo de Joaquín, el alcalde se propuso que, si ponía contenedores, los vecinos reciclarían

En el pueblo de Joaquín, el alcalde se propuso que, si ponía contenedores, los vecinos respetarían más, reciclarían, y la ciudad seria una ciudad limpia y acogedora. Un lunes por la noche, Joaquín fue a pasear con su perro, porque no se podía dormir. Joaquín también cogió toda la basura para reciclarla. Joaquín escuchó unas voces,se acercó un poco y... ¡No se lo podía creer! Cuatro contenedores, cada uno de un color, charlaban:

-Qué hambre tengo -decía el contenedor amarillo.

-Sí, necesitamos comer cosas recicladas para tener energía -decía el contenedor azul, mientras el contenedor verde clarito y verde oscuro escuchaban a los demás contenedores.

Entonces, Joaquín se acercó y les dijo:

-Hola, contenedores. Tengo cosas recicladas para cada uno de vosotros -los contenedores abrieron la boca.

-Para ti, contenedor amarillo, te traigo: botellas, bolsas, bandejas? Para ti, contenedor azul, te traigo: cajas, bandejas, agrupadores... Para ti, contenedor verde clarito, traigo botellas de vidrio. Y, por último,para ti, contenedor verde oscuro, traigo basura. ¡Que disfrutéis!

Joaquín, todas las noches,cogía basura, botellas de vidrio, botellas... Y los contenedores así, como lo he explicado, se ponían muy contentos al volver a tener energía.

Autora: Ángela Picon García

Edad: 8 años

Curso: 3º de Primaria

CEIP Ausiàs March (Benidorm)

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