Había una vez una niña en pijama.
Hacía palmitas sentada en su cama.
El sol de los sueños giraba para ella
al ritmo de una trepidante melodía.
La vaca Mugilda, que pasaba por allí ,
Preguntó a la niña:
-¿Puedo girar para ti también yo?
Por respuesta la niña guiñó el ojo izquierdo.
Eso sí, el Sol puso una condición:
-¡Girarás al mi alrededor!
A Mugilda eso no le importó,
¡y mugió de felicidad!
El gallo Crestón que pasaba por allí,
preguntó a la niña:
-¿Puedo girar para ti también yo?
Por respuesta la niña giró el ojo derecho.
Y todos sabemos lo que significa
el guiño de un niño.
El Sol puso una condición:
-¡Girarás a mi alrededor!
A Crestón eso no le importó,
¡y cantó de entusiasmo!
Había una vez una niña en pijama.
Tan pronto reía como bostezaba.
El Sol de los Sueños giraba para ella
y a su alrededor la vaca Mugilda, muge que muge,
y el gallo Crestón, canta que canta,
los tres al ritmo de una dulce melodía.
1.- Escribe y pon nombres a otros animales que quisieran girar para Sira. ¿Qué condición les ponía siempre el Sol?
2.- Escribe un cuento de una niña soñadora que buscaba amistad con animales y que se hace muy amiga de uno de ellos. Envíalo por correo postal con un dibujo y acompañado de tus datos personales (Nombre, apellidos, colegio, curso, teléfono y una dirección de correo electrónico) al Concurso literario del Grupo Leo. Apartado de Correos 3.008, 03080 Alicante.
