El texto de Gibraltareña nace de la amistad de su autor, Juan Luis Iborra, y la actiz Elsa Matilla, y de los recuerdos estivales de Iborra en Gibraltar.

«Allí decidí que debía transcurrir esa historia que no paraba de rondarme la cabeza. Y comencé a esbozar la historia de una mujer valiente, generosa, tan divertida en su vocabulario como en su alocada vida», apunta Iborra de esta historia llena de ternura y humor en la que Matilla interpeta a una prostituta que pone amor en cada acto sexual.

Tras la función, la actriz y el dramaturgo y director mantendrán un encuentro con el público.