Información

Información

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

Villaviciosa de al lado

Cuando cae el Gordo en un club de alterne

Cuando cae el Gordo en un club de alterne

Es, como señala su director, una comedia costumbrista, de humor blanco, ambientada en un pueblo y cuyo punto de partida está basado en un hecho real: el primer premio de la lotería recae en una modesta localidad española, pero la mayoría de las participaciones las ha repartido el club de alterne del municipio. Con esta premisa, Villaviciosa de al lado pretende explicar qué pasa cuando sacamos lo peor de cada uno, de qué manera luchamos entre lo que queremos ser, y lo que realmente somos, ya que la mentira, la falsedad y la hipocresía, al igual que ocurre con los premios de la lotería, suelen estar muy repartidas. Se trata del quinto largometraje del director Nacho G. Velilla, que debutó en 2008 con Fuera de carta y que rodó Que se mueran los feos en 2010, Perdiendo el norte en 2015 y No manches Frida en 2016, esta última con pabellón norteamericano.

Villaviciosa, una tranquila localidad que ha sido agraciada con el primer premio de la lotería. Pero ha sido el Club Momentos, el local de alterne del pueblo, el que ha repartido el premio en participaciones entre sus clientes. Es entonces cuando surge el dilema: ser millonario pero cargando con la etiqueta de putero, o seguir en números rojos, con una moral intachable. Un dilema que convierte ese sueño en una verdadera pesadilla. De entre los numerosos personajes de la cinta, puesto que estamos ante una comedia coral, cuatro destacan por su relevancia social o política. La Mari es la madame del Club Momentos, aunque ella es poco amiga de los tecnicismos y más cuando ese término se usa en el pueblo para referirse a ella de forma despectiva. Anselmo es el alcalde y entiende la política a la antigua usanza, utoritario y prepotente, una de sus frases favoritas le define: «Si no puedes amenazar un par de veces al día, ¿para qué te sirve estar en política?». Ricardo es el progre. De aspecto algo desaliñado, con ínfulas de intelectual, la cuota izquierdista, ecologista y bastante cargante del pueblo. Finalmente, está César, el frutero, pesimista de nacimiento, lleva por bandera el principio de Murphy de «si algo puede salir mal, probablemente saldrá mal».

Lo último en INF+

Compartir el artículo

stats