Con Sicilia como telón de fondo, Piero Messina navega por un amplio rango de emociones para contarnos la extraña e irresistible relación entre dos mujeres de diferentes generaciones. La ganadora de un Óscar a la mejor actriz de reparto por El paciente inglés y también del César por Tres colores: azul y del Premio de Interpretación del Cine Europeo por Chocolat, la francesa Juliette Binoche interpreta a Anna, quien conocerá a la novia de su hijo los días próximos a Pascua. La película supone el debut en la dirección de largometrajes del realizador italiano Piero Messina, experimentado cortometrajista y documentalista que se ha curtido en el cine como mano derecha de Paolo Sorrentino en películas como La Gran Belleza o Un lugar donde quedarse, gracias a su tarea de ayudante de dirección.
Anna es una mujer francesa que pasa sus días en soledad en su vieja villa de Sicilia. Inesperadamente llega Jeanne, la novia de su hijo Giuseppe, invitada por él a pasar las vacaciones de Pascua. Anna no conoce a Jeanne y Giuseppe no está. Mientras las dos mujeres esperan la llegada de Giuseppe, y pese a los secretos que se ocultan, empiezan a abrirse la una a la otra.
La cinta ha tenido un largo recorrido por los festivales más prestigiosos del mundo, con gran éxito entre el público y la crítica, obteniendo 3 premios en el Festival de Venecia. Sobre ella, el propio director declaró que lo que le pasa a sus protagonistas es que, protegidas, pero estando solas en el mundo, Anna y Jeanne empiezan a esperar la vuelta de Giuseppe. «Y mientras tanto -añadió-, imaginan diferentes realidades que existen específicamente porque ellas las comparten. Así se crea una silenciosa intimidad entre ellas. Casi inconscientemente se aferran la una a la otra, se acercan esforzándose por protegerse y a la vez, abrazando una frágil verdad».
