LLeva a la pantalla grande otro caso real de los expedientes de los prestigiosos demonólogos Ed y Lorraine Warren y es una secuela de Expediente Warren. The conjuring, que se estrenó en 2013 y que con sus más de 319 millones de dólares de recaudación en todo el mundo se convirtió en la cinta de terror más taquillera de la historia del cine después de La semilla del diablo. Una segunda entrega que muchos aficionados califican como tercera al considerar que Annabelle, una cinta dirigida por John R. Leonetti en 2014, forma también parte de esta saga. Además, la que ahora vemos cuenta con el mismo director, el australiano de padres malayos y chinos James Wan, un joven cineasta que tiene en su haber títulos de la notoria rentabilidad de Saw, Insidious y Fast & Furious 7. También nos devuelve a los protagonistas, la nominada al Óscar Vera Farmiga y Patrick Wilson, que incorporan de nuevo a los esposos Warren.

Acogida con elogios por la crítica, este thriller sobrenatural saca a la luz otro expediente terrorífico, que obliga en esta ocasión a Ed y Lorraine, en una de sus investigaciones paranormales más aterradoras, a viajar al norte de Londres para ayudar a una madre soltera que vive sola con sus cuatro hijos en una casa plagada de espíritus malignos. James Wan negó que esta película sea una vuelta al cine de terror¨«Para mí es un drama tradicional que resulta ser escalofriante. Pero me centro en los personajes y en continuar explorando el mundo de Ed y Lorraine Warren. No estoy volviendo al terror, estoy volviendo a estos dos personajes que realmente me gustan».

Wan añadió que volver a tener la oportunidad de trabajar con Vera Farmiga y Patrick Wilson era algo que no quería desaprovechar. «Con la primera película -expresó- me di cuenta de que al público le gusta que le asusten, por supuesto, pero también le gustan mucho los personajes de Lorraine y Ed, así que con Vera y Patrick traté de profundizar en su historia. Quería que la película luciera diferente. Encontré una historia dentro de la carrera de los Warren que es casi tan famosa como la historia de Amityville y que ocurre en Endfield (barrio en el norte de Londres)».

En su actitud ante una historia que no solo está basada en hechos reales, sino que algunos de los personajes todavía viven, el realizador recalcó que los guionistas volvieron a entrevistar a Lorraine, también a la familia afectada en el caso de Enfield, los Hodgson, Janet Hogdson, Margaret Hodgson y Billie Hodgson. «Básicamente quieres tener un relato de primera mano de lo que pasó. Aunque el caso fue documentado en profundidad, es importante escucharlo directamente de la gente a la que le pasó para poder comprender realmente la emoción y los personajes.

Preguntado si el que muestre casos reales hace más terrorífica una película, Wan dijo que creía que sí: «Las historias sobrenaturales son difíciles de creer, porque se basan en el relato de gente. Pero el caso de Enfield está tan documentado?»