Información

Información

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

Héctor Alterio: «La experiencia de la vida te da todo»

De los 87 años que ha cumplido, lleva 80 con el teatro a cuestas

Héctor Alterio: «La experiencia de la vida te da todo»

El padre es el título de la obra que lleva ahora por los escenarios. Se sentirá muy identificado....

Con el título y con la edad del personaje, con lo que no me siento identificado es con la enfermedad del personaje que contribuye a crear unas situaciones determinadas por el autor, un escritor francés joven que con esta obra está dando la vuelta al mundo con un éxito inusitado. Yo puedo contar a partir de las cuatro o cinco funciones que llevamos y todos coinciden en que la propuesta es inquietante y el público l o pasa bien. Las respuestas inesperadas, ambiguas, provocan una sonrisa y un divertimento a partir de una enfermedad muy triste, que hace sufrir más al entorno que al enfermo.

La obra analiza el tema de la vejez, la demencia senil, el Alzheimer. No sé si son temas que Héctor Alterio se plantea o si esta obra le ha hecho reflexionar sobre ello.

Fíjate... vamos a empezar porque tengo una edad en la que tengo en mi haber cientos de representaciones y de personajes que se van amoldando a medida que pasan los años. Pero afortunadamente nunca pienso en esto. Sé que es una situación que tiene que venir... o no tiene por qué. La muerte no se sabe cuándo va a venir pero viene. Sin embargo, las enfermedades pueden venir o no pero como no se sabe pues yo sigo trabajando y mi trabajo consiste en memorizar.

La dirección es de otro grande del teatro, José Carlos Plaza, que ha optado por unir drama y humor. ¿Es esa la mejor forma de afrontar el tema?

Sin faltar el respeto al tema, por supuesto. Es un aditamento, un ingrediente saludable, porque se le quita un poco lo ceremonioso que a veces se aleja del público. La gente participa divertido de una cosa que es trágica, pero sin faltar el respeto.

Usted es optimista y hacerse mayor también tiene cosas buenas

Claro. Hay que afrontar la realidad y si se hace con respeto, con seriedad, pues no tiene algo dramático de que está pasando la vida. Tengo 87, nací en el 29 y empiezo a hacer teatro con 6 o 7 años. Y no he dejado de hacerlo hasta ahora, no tengo otra posibilidad, y siempre por una razón o por otra me tocan personajes como este y los hago con mucho gusto. La experiencia de la vida te da todo y de todo uno saca conclusiones y trata de no repetir errores. En este caso tanto la vida como la profesión voy obrando más o menos lo mismo. En el teatro me permite mejorar, igual que en la via, algo que en el cine no se da.

¿Se siente más mayor como persona o como actor?

Va unido. Como actor siempre hay un papel un personaje que se acomoda a mi persona.

¿Es consciente de que es un actor muy querido, que gusta mucho y además cae muy bien?

Sí, sí. Si yo respeto a los demás, pues me respetan a mí. Aunque no siempre ocurre, es así.

¿Cómo ha cambiado su percepción del escenario en todos estos años?

Ha cambiado como las circunstancias que me rodean en cada época de la vida. Antes las cosas se hacían de una manera, luego la tecnología hizo que se apresuraran más y después fue cambiando la visión y la forma de hacer teatro. Pero hay una base inalterable que es el juego, la mentira que tiene que estar dicha de una manera que el público se lo crea. El público va a comprar una localidad y con ese dinero nosotros vivimos; se sienta en una butaca a sabiendas de que va a ver algo que no es verdad, pero se lo tenemos que hacer creer. Tengo que hacer creer al público que la mentira del teatro es verdad. Ese juego en el teatro ha sido siempre así.

¿No recibe llamadas del cine?

Bueno sí, pero muy poco, se han espaciado mucho por la situación crítica. Las ofertas se aplazan o se distancian, aunque yo afortunadamente tengo la salida del teatro.

Dé algún consejo para que afrontemos la situación actual, usted que ha pasado por momentos tan complicados.

No estoy capacitado para dar consejos. Estamos en un momento confuso, no se sabe qué va resultar de todo esto, pero es un momento que está en movimiento, un momento saludable, porque hay enfrentamiento, confrontamiento, está vivo, está en permanente tira y afloja, no es una cosa inamovible. Todo eso hace que de pronto el ciudadano tiene la opción de apoyar al que simpatice más o crea que sea lo mejor. Está muy bien.Yo estoy expectante, a ver si nos quitan tantos impuestos como nos han puesto en mi profesión.

Los escritores dejan como legado sus obras, los actores sus películas o sus obras de teatro, y usted además deja el legado de dos grandes actores, sus hijos.

Eso sí, es un accidente. Tuve dos hijos que se dedicaron a esta profesión, algo que yo no quería al principio, pero cuando tuvieron la opción de decidir por sí mismos no tuve más nada que hacer, desearles suerte y la tuvieron. Me divierto mucho viéndoles, aunque no puedo evitar pensar que son mis hijos y me gustaría a veces decirles esto sí o esto no.

No se retire nunca, por favor.

No hay problema. Será un retiro forzoso...

Lo último en INF+

Compartir el artículo

stats